Banderas obvia en su última película a la Ciudad de la Luz de Alicante

Antonio Banderas estuvo en Alicante, se fotografió con el consejero de Economía, Gerardo Camps, alabó las condiciones técnicas de los estudios de cine y recibió de la Generalitat una sustanciosa ayuda económica por rodar en la Ciudad de la Luz. Sin embargo, el actor en su última película El camino de los ingleses reduce exclusivamente a los créditos la mención a estos estudios alicantinos, y la película, en realidad, se convierte en una promoción para la ciudad de Málaga. Varios espectadores han manifestado en los últimos días su "desconcierto y malestar" por la escasa proyección que se hace de estos estudios en la cinta.

El actor estuvo rodando en Alicante durante unas tres semanas, y según explicaron entonces fuentes de la compañía, los estudios Ciudad de la Luz acogieron tan sólo el rodaje de las escenas interiores. En febrero de este mismo año el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, evitó cuantificar la ayuda económica que había recibido la productora por rodar en Alicante: "Son cuestiones que tienen que ver con productores y Ciudad de la Luz", se limitó a contestar. En aquel momento el Consell había concedido más de 200.000 euros en ayudas para las empresas valencianas que participaran en alguna coproducción cinematográfica.

Ahora el resultado es que Alicante y sus estudios pasan desapercibidos para el espectador. Además, el actor y director de cine evitó organizar un preestreno o pase especial de su segunda película en Alicante, y prefirió hacerlo en Málaga, que se convierte realmente en el verdadero escenario de El camino de los ingleses. Este periódico intentó sin éxito conocer ayer la opinión del director de la Ciudad de la Luz.