Desalojan cuatro colegios por la tromba de agua en Pontevedra

Casi 900 alumnos de centros escolares de Vilagarcía, Poio y Marín fueron evacuados de sus aulas "por precaución" ante la tromba de agua que cayó ayer por la mañana y que afectó especialmente a las provincias de Pontevedra y A Coruña. Calles anegadas, carreteras cortadas por el agua o pequeños desprendimientos y la actividad frenética de los bomberos y demás servicios de auxilio y protección volvieron a dar la tónica de la jornada.

La lluvia cayó intensamente durante toda la mañana, acompañada de fuertes rachas de viento. Los servicios de protección ciudadana tuvieron que emplearse a fondo en muchos municipios costeros, retirando ramas, cascotes arrastrados por las aguas o achicando locales inundados.

En Vilagarcía volvieron a anegarse varias calles y se inundó el colegio de A Lomba. Aunque Protección Civil no estimó necesario su desalojo, la dirección del centro avisó a los familiares de los 370 alumnos y éstos fueron evacuados ante el temor de que arreciase el temporal y quedasen atrapados en su interior. También fue desalojada la escuela infantil Vagalume.

Comerciantes y vecinos permanecen en vilo y toman precauciones a cada chaparrón, utilizando todo tipo de artilugios para evitar que el agua entre en viviendas y locales. En esta ciudad la actividad comercial aún no se ha restablecido y se siguen evaluando las cuantiosas pérdidas de la pasada semana, mientras en algunos garajes, como el de la calle Edelmiro Trillo, las motobombas siguen sacando agua y las grúas retirando coches, la mayoría con daños irreparables. Todas las miradas están en el río Con, cuyo desbordamiento fue la causa principal de las catastróficas riadas. Los operarios municipales han trabajado a destajo para drenar su cauce.

En Poio fue evacuada la escuela infantil Tarrío-Samieira; en el colegio Isidora Riestra, aunque se inundó el patio y el aparcamiento, lograron acabar las clases. Por precaución se suspendieron en el colegio Sequelo, de Marín, de donde los padres se llevaron a los alumnos, sin que llegarAn a producirse inundaciones.

En Vigo, las calles Pablo Iglesias y A Cañiza, en la zona de Balaídos, una de las más bajas de la ciudad, quedaron totalmente anegadas bajo un metro de agua. Un conductor tuvo que ser rescatado del coche que arrastraba la corriente.

Accidente

En Redondela, por efecto de la lluvia, que limitó la visibilidad al conductor, el coche en que viajaban los cuatro miembros de una familia (un matrimonio, su hija y su nieta) chocó con un autocar, que continuó viaje sin mayores problemas. Sin embargo, el conductor del coche, de 69 años, tuvo que ser excarcelado por los bomberos y trasladado a Povisa, donde quedó ingresado con pronóstico grave; su mujer, hija y nieta fueron dadas de alta con lesiones leves.