Un vecino de Posadas declara que tenía matarratas como el que mató a las niñas

Un vecino de las dos niñas fallecidas en Posadas por inhalación de un matarratas se presentó ayer voluntariamente ante la Guardia Civil y declaró que tenía en su casa pastillas de fosfuro de aluminio, la sustancia que supuestamente causó la muerte de las pequeñas y la intoxicación de sus padres.

Según fuentes de la investigación, el vecino indicó que horas después de producirse la muerte de las dos niñas, el pasado jueves, ventiló la vivienda.

Las fuentes indicaron que los agentes han tomado algunas muestras del producto en la casa y que han sido enviadas al Instituto Nacional de Toxicología en Madrid.

El vecino no ha sido detenido, según las fuentes, que añadieron que en la primera inspección ocular los agentes no han detectado grietas que pudieran hacer que la sustancia traspasara las paredes de la vivienda.

El director gerente del hospital universitario Reina Sofía de Córdoba, José Manuel de Aranda, indicó que la investigación judicial tendrá que determinar "por dónde entró el producto al domicilio, ya que no se encontraba en el mismo".

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