El diputado general de Vizcaya crítica a jugadores y a rectores del Athletic

El Diputado General de Vizcaya (la máxima autoridad foral de la provincia), José Luis Bilbao, cargó ayer contra los distintos estamentos del Athletic en un artículo publicado en tres medios locales en el que exigen un cambio de rumbo de la entidad y alerta sobre los riesgos que corre el club rojiblanco en las próximas elecciones (previstas para junio).

Dirigentes, jugadores, responsables técnicos,... nadie se salva de la diatriba del diputado general que incluso se permite asegurar que "en lo deportivo no hay más que repasar las deficiencias técnicas que se ven partido a partido". Bilbao, incluso se adentra en asuntos más profundos, más sensibles a la entidad. Así, afirma respecto al caso Gurpegui, que ha sufrido una sanción de dos años por dopaje por un pecado "que no ha sido otro que seguir supuestamente las pautas que alguien le ha marcado sin que por ello se depuren responsabilidades (...) El jugador está sufriendo lo indecible injustamente y aquí no pasa nada".

La plantilla no sale indemne de su crítica. "En lo económico, una pregunta", escribe José Luis Bilbao, "¿pagaría alguien fuera lo que cobran aquí?" Incluso, recrimina su actitud personal cuando afirma que "a todos nos gusta la chufla, pero un deportista de élite debe elegir entre lo que es, para lo cual debe cuidarse físicamente, o salir de juerga por las noches como muchos jóvenes y menos jóvenes pero que no ganan lo que ellos". Para ello recuerda los rumores que rodearon el partido de Copa del UEFA Athletic- Austria de Viena 2005) cuando se habló de salidas nocturnas de futbolistas antes del encuentro.

Los dirigentes no quedan exentos de la diatriba. Bilbao les reclama transparencia y dedicación, y alerta sobre los riesgos de las próximas elecciones. "Los tráficos de influencias, la expectativa de negocios y contratos ante la posibilidad de un nuevo campo pueden llegar a aglutinar intereses de forma que haya personas que no vengan a servir a la Institución sino a sacar lo que puedan", escribe.

Lezama tampoco escapa a la crítica del Diputado General. Sobre los responsables del fútbol base se pregunta: "¿Son proporcionados los sueldos que cobran con los resultados que obtienen?", critica los contratos blindados y les acusa de ser "el poder en la sombra al margen de quién gane las elecciones".

Tras recordar a jugadores y dirigentes que el club también recibe dinero público (la Diputación ha acordado distintos patrocinios de salvamento económico y ha renegociado favorablemente un enorme e histórico fraude fiscal del club), Bilbao crítica el amiguismo que preside las elecciones (entradas a cambio de votos o firmas de compromisarios, como ejemplo) y reclama a quienes quieran cambiar la filosofía del club "que lo hagan a cara descubierta", bien sea en cuanto a la contratación de extranjeros o en el cambio del club a sociedad anónima.