Los alumnos saben tomar decisiones

¿El perfil del alumno que se anima a entrar en un consejo escolar se corresponde con el del estudiante responsable ? "En mi caso, sí", responde Yolanda Cubero. Su compañero Alejandro Martín, también se reconoce como un joven comprometido. Ambos tienen 16 años y cursan primero de Bachillerato.

"Yo soy de los que hacen oposición a los profesores", confiesa, sin embargo, Álvaro López, de 17 años. López estudia segundo de Bachillerato y si es elegido en estos comicios, éste será el segundo año en que forme parte del consejo escolar de su centro educativo.

Los tres estudian en el Instituto de Enseñanza Secundaria Ciudad Jardín de Sevilla y este año se han presentado voluntarios para formar parte del consejo. En su centro, serán elegidos cinco candidatos. "Se han presentado sólo seis", informa Álvaro, con las listas de candidatura en la mano. "En realidad, yo no me iba a presentar, pero como había tan poca gente, me propusieron que siguiera", dice.

Para López, el primer año dentro del consejo ha dado sus frutos, aunque reconoce que no siempre se toman grandes decisiones. "Te explican las medidas o iniciativas, hay una fase de ruegos y preguntas, y por último, se vota. Los alumnos, normalmente, hacemos propuestas cuando se trata de hacer actividades extraescolares, pero en lo demás, pintamos más bien poco", afirma este alumno. "Pero cuando algo nos importa de verdad, nos escuchan: una vez los profesores se estaban planteando impedir que los alumnos de Bachillerato salieran fuera del centro en los recreos y horas libres. Yo le dije a la directora que si lo prohibía los alumnos iban a pedir su cabeza. Finalmente, no lo hicieron", añade sonriente López, que cuando termine en el Instituto tiene previsto estudiar para ser policía o profesor de Educación Física. "Si estás dentro conoces más a los profesores; los puedes entender mejor y ellos a ti".

Por su parte, Alejandro y Yolanda, aunque no han formado parte jamás de un consejo escolar, sí tienen experiencia en representar al resto de sus compañeros ante los profesores. "Yo he sido delegada durante cinco años", explica Yolanda quien, como Alejandro, ha formado parte del grupo de alumnos tutores que ayudaban a integrarse a los recién llegados al centro, normalmente, alumnos de 1º de ESO.

"Yo fui subdelegado varias veces. Cuando se toman decisiones que no nos gustan, casi todos los compañeros se alteran, pero luego nadie se implica. Si quieres cambiar algo, tienes que participar", opina Alejandro Martín.