Accidente mortal de Gálvez

El ciclista barcelonés Isaac Gálvez, de 31 años, falleció en la madrugada de ayer tras sufrir una caída durante la 66ª edición de los Seis Días de Gante. La carrera se celebraba en el velódromo De Kuipke, ante 3.000 espectadores, y el corredor perdió el control de la bicicleta después de chocar con su colega belga, Dimitri de Fauw. A gran velocidad, se golpeó el mentón y el pecho contra una barandilla situada en el exterior de la pista. Aunque fue reanimado allí mismo por los servicios de urgencia, Gálvez murió camino del Hospital Universitario de Gante.

En el momento del accidente, el corredor y su pareja deportiva, Joan Llaneras, que le acompañó en el centro médico, iban segundos en la clasificación de la modalidad de madison. "Gálvez iba remontando por el exterior y, justo en ese momento, De Fauw, que había ido en cabeza, se estaba dejando caer", cuenta Marco Villa, ciclista italiano que participaba en la prueba. "Los manillares de ambos se enredaron y Gálvez, que marcharía a 55 o 60 kilómetros por hora, salió disparado hasta chocar con la barandilla". Era poco más tarde de las doce y media de la noche. Quedaban diez minutos de madison. La jornada debía terminar a las dos de la mañana.

"Fue una caída como tantas. Dos corredores que se enredan y caen", dijo Patrick Sercu, organizador de los Seis Días de Gante y uno de los más famosos pistards de la historia, "pero en esta ocasión el resultado ha sido fatal". Según Henrik Elmgreen, presidente de la Unión Internacional de Velódromos, la de Gálvez es la primera muerte de un ciclista en unos Seis Días desde hace 50 años.

La carrera y el resto de la competición fueron suspendidas. Mientras entrenadores y directivos analizaban lo ocurrido, la Fiscalía General de Gante ha designado a un experto que tras analizar las imágenes del accidente ha descartado que hubiera negligencia o falta penal. Lo considera accidente en competición deportiva.

Ayer por la tarde, en el Hospital Universitario de Gante, se le practicó la autopsia a Gálvez. "Ha sido pura fatalidad", explicó uno de los patólogos; "chocó con el pecho contra las vallas y, por la fuerza del impacto, sufrió una parada cardiaca instantánea. Además, se le rompieron algunas costillas y se le clavaron en el corazón. La muerte fue instantánea".

De Fauw, el joven ciclista de Gante con el que se rozó, tuvo que ser hospitalizado al sufrir una crisis de ansiedad.

Gálvez, sprinter compacto de 1,76 metros y 74 kilos que pasó al profesionalismo a los 24 años, pertenecía al equipo Caisse d'Épargne-Illes Balears, por el que fichó en 2003. El pasado 16 de abril se había proclamado campeón del mundo de ciclismo, también en la especialidad de madison y siempre con Llaneras como pareja. Era el segundo título mundial para ambos. El 24 de octubre de 1999 subieron al podio en Berlín en esta misma modalidad, una de las más difíciles porque precisa de una perfecta sincronización.

El domingo, con el velódromo de Gante ya vacío de público y en medio de una gran consternación, fue depositado un ramo de flores en el tramo de la pista donde chocó el español. Con el recinto precintado para que puedan efectuarse las diligencias pertinentes, la imagen recordaba el homenaje que suele hacerse a las víctimas de los accidentes de carretera.

Gálvez pertenecía a una íntima dinastía de velocistas -su padre y su hermana también han competido- y fue calificado anoche de "deportista de altísimo nivel que formaba parte de presente y del futuro del ciclismo español" por Jaime Lissavetzky, el secretario de Estado para el Deporte. En unas sentidas declaraciones efectuadas desde España, añadió que a la "enorme tristeza por la muerte" se unía "el pesar por la desaparición de un velocista que contaba en los planes para 2008, como pareja de Llaneras". Lissavetzky también aseguró que intentaría que la repatriación del cadáver fuera "lo más rápida posible".

Eugenio Bermúdez, secretario de la Federación Española de Ciclismo (RFEC), se trasladó a Gante junto con el director técnico de la misma, José Luís Algarra. Otro tanto hizo Ángel Luís López de la Fuente, subdirector del Consejo Superior de Deportes. Los tres esperaban poder agilizar los trámites. En la capital flamenca también se encontraba ayer Eusebio Unzue, el director del Caisse d'Épargne, el último equipo de Gálvez. Antes de tomar el avión, Unzue, que viajó acompañado de Débora, la hermana de Gálvez, recordaba que el corredor se había casado el pasado 28 de octubre con Davinia. "La última vez que estuve con él estuvimos planificando la próxima temporada, la mejor forma de llegar bien preparado a su gran objetivo, el Mundial, que se celebrará en Palma de Mallorca", dijo Unzue. "

Compañero de Llaneras en los momentos de mayor gloria deportiva, Gálvez dijo de él durante el Mundial de Burdeos que era "su media naranja sobre la bici".