Dos de las hijas del dueño del Apolo llevan al juez a su viuda por la herencia

La disputa por la herencia del magnate de la revista española Matías Colsada (cuyo verdadero nombre era Matías Yáñez Jiménez), dueño de los teatros Apolo de Barcelona y Monumental de Madrid, ha llegado a la Audiencia después de que sus hijas no reconocidas denunciaran por estafa procesal a la viuda del empresario. El juicio contra la que fue mujer de éste, Aurelia Buj, se celebrará próximamente en la sección segunda de la Audiencia de Barcelona, informa Efe.

Las descendientes de Colsada, una de las cuales falleció hace unas semanas en Hungría en un accidente, han llevado a juicio a Buj -de avanzada edad y que no está previsto que sea procesada porque ha sido declarada incapacitada-, a dos apoderados suyos y al hermano del empresario, Florencio Yáñez, beneficiario de una parte de la herencia. Las hijas de Colsada, que murió en el año 2000, reclaman la totalidad de su herencia, valorada en decenas de millones de euros, pese a que un juez de primera instancia de Barcelona dictaminó que la mitad de los bienes del empresario eran gananciales y, como tales, pertenecen a su mujer.

Tras el fallecimiento de Colsada, que murió sin dejar testamento, su viuda acudió al notario para ser declarada heredera, pero el hermano del difunto alegó que Matías llevaba 40 años separado de ella y que, además, existían descendientes extramatrimoniales. Ese conflicto acabó en los tribunales con una sentencia en la que, en febrero de 2001, el Juzgado de Primera Instancia número 11 de Barcelona declaró heredera universal a Aurelia Buj, después de que alcanzara un acuerdo extrajudicial con su cuñado por el que éste se embolsó 525 millones de pesetas de la herencia.

Prueba de ADN

La legalidad del acuerdo está siendo cuestionada ahora por las hijas del empresario, María del Carmen y Julia, quienes dos meses después de la muerte de su padre interpusieron una demanda para ser reconocidas descendientes extramatrimoniales de Colsada. Para comprobar la paternidad, fue necesario exhumar su cadáver con el fin de extraerle muestras biológicas que permitieran cotejar su ADN con el de las dos mujeres que decían ser sus hijas.

En otra vuelta de tuerca de este vodevil digno de una revista, irrumpió en escena Tania Doris, la vedette que durante 20 años fue pareja del empresario y protagonista de la mayoría de sus espectáculos. Acudió a los tribunales para pedir el 50% de los bienes del magnate alegando que su patrimonio era común a tenor de un pacto tácito con Colsada, pero el juzgado le denegó sus derechos a la herencia.

Matías Colsada murió en Barcelona a los 88 años. Empezó en el mundo del espectáculo cantando tangos por la radio cuando era adolescente y logró levantar un imperio de escenarios. El empresario se hizo célebre por las revistas protagonizadas por jóvenes ligeras de ropa. Ellas se anunciaban con una canción cuya letra decía: "Somos las chicas alegres que trajo Colsada para quitarles el mal humor".