"Prefiero dar el pase a marcar"

"Volver al Racing había empezado a ser una obsesión para mí", reconoce Pedro Munitis (Santander, 1975), pocos meses después de su salida del Deportivo de La Coruña a cambio del guardameta Aouate. Ahora, centrado en El Sardinero, asegura que se encuentra "plenamente satisfecho del cambio". Para el delantero al que las circunstancias siempre han llevado al extremo, la temporada, que hoy le lleva al Bernabéu, su antiguo estadio, empieza a resultar agradable.

Después de un pésimo comienzo, con tres partidos perdidos y sin encajar un gol, el Racing ha encadenado siete encuentros consecutivos sin conocer la derrota. "Estamos viviendo un momento dulce, pero somos conscientes de que volverán los tiempos difíciles, por lo que conviene no relajarnos", explica el futbolista. "Yo también considero que estoy en una trayectoria ascendente, pero es importante demostrarlo en el Bernabéu", asegura. Hace seis años ya se reivindicó en el estadio blanco, con un partido soberbio en el que los racinguistas derrotaron al Real Madrid y clavaron cuatro goles en las mallas defendidas por Casillas. Entonces, Salva era su compañía en el ataque y la actuación de Munitis quedó tan presente en la directiva blanca que fue fichado por el club madridista al año siguiente. Sin embargo, sus dos temporadas fueron el único paso en falso que Munitis ha dado a lo largo de su trayectoria. Jugó, pero no disfrutó. La ruptura se plasmó cuando, cedido por el Madrid en el Racing, volvió a batir a Casillas en El Sardinero y lo celebró con vehemencia.

Pero más que los goles, el punto fuerte de Munitis son las asistencias. Este curso, Zigic recibe el maná en forma de pases que el extremo reparte alegremente. En lo que va de Liga, el extremo ha centrado 104 veces al área rival, cifra que sólo supera Yeste. "Siempre me he sentido más cómodo pasando que metiendo goles. Para mí, resulta la misma alegría por dar el pase que por marcar el gol", indica Munitis, cuyo nombre ya sonó fuerte el pasado año para volver a la selección, Nunca recibió la llamada de Luis.

De momento, la pareja formada por el cántabro y por el tallo serbio (2,02 metros) sirve de única arma ofensiva para los cántabros. De los siete goles celebrados por el equipo de Miguel Ángel Portugal, tres han sido convertidos por el serbio y otros dos por el del Barrio Pesquero. "Cada jugador es diferente y Zigic, con sus características, su altura y su potencia, nos ha venido muy bien y nos hemos adaptado en el juego", corrobora. La afición de Santander ya les ha bautizado como el dúo sacapuntas, en homenaje a la pareja humorística de los años 90 y también a la capacidad de ambos jugadores para asociarse y desatascar partidos que parecían perdidos.

Esta noche (20.00, PPV), tratarán de demostrar que su racha no es cuestión de suerte y que la dupla Munitis-Salva, que acabó con este último como pichichi, se puede repetir con Zigic. Para Munitis, hoy no hay nada más en juego que la victoria. "No encuentro una responsabilidad especial en jugar en Bernabéu", indica.