Un ex preso etarra acusa a De Juana de entorpecer el fin de la violencia
"Egocéntrico" y "manipulador", son algunos de los calificativos que un ex preso etarra que fue compañero de cárcel de Iñaki de Juana Chaos le dedica ahora al recluso -que ha iniciado una segunda huelga de hambre- en una dura carta abierta enviada a la cadena SER.
En la misiva, el ex preso, que prefiere que no se conozca públicamente su identidad y se muestra a favor del proceso de paz, acusa a De Juana de entorpecer el camino hacia el fin de la violencia y de estar manipulando a un pueblo que quiere una "paz justa y costosa", y a unos jóvenes "que irán a la cárcel por seguir" sus "directrices".
A pesar del tono duro con su compañero, el remitente también deja claro que no está de acuerdo con la decisión de juzgarle y condenarle por dos artículos escritos en el diario Gara. Pero a continuación señala que con sus huelgas de hambre, sus cartas y sus amenazas está poniendo en peligro la salida del conflicto, y una reactivación de la lucha armada.
El antiguo compañero de presidio de De Juana le reprocha que su actitud ha impedido la salida de muchos jóvenes de ETA que continúan en prisión. "Estarás conmigo", dice el remitente, "que tú votaste en repudiar a compañeros por acogerse a medidas de reinserción, que tú practicaste el desprecio hacia ellos y que eras partidario de no solicitar ningún tipo de redención que acortase la condena, ya que esto suponía colaborar con nuestros verdugos, y ahora, tú que entraste en prisión en 1987 intentas salir ya cuando te correspondería en 2017; veo que hay dos varas de medir".
Vileza con los Becerril
También le recrimina a De Juana que se haya reído en varias ocasiones del dolor ajeno, como cuando los terroristas asesinaron al matrimonio Becerril, y él pidió cava y marisco para celebrarlo. "Por aquella vileza, sí que debieron meterte una dura condena", asegura.
Tras acusarle de pasarse el día "mirándose el ombligo", el ex compañero de prisión de De Juana le acusa de mantener unas actitudes que le han llevado a "un callejón sin salida". Y continúa: "Y estás llegando a poner en peligro, con todo ello, una salida al conflicto y una reactivación de la lucha armada, bien sea callejera o de alta intensidad. No consiento que engañes y manipules a nadie excepto a ti".
Además, le reprocha que con sus cartas -"que tu vanidad te obligó a escribir"- echó a perder su salida de la cárcel y la de "muchos otros que venían detrás". La carta concluye con un "Agur: Negozazioaren Alde" (Adiós: A favor de la negociación).
