Una mujer muere en su coche por una crecida de agua en Alzira

Una mujer falleció ayer al verse atrapada en el vehículo en el que circulaba por la crecida de agua en un barranco en Alzira (Valencia). Fuentes de la Policía Local de esta localidad indicaron que la fallecida presentaba signos de haber muerto ahogada arrastrada cientos de metros por el agua mientras atravesaba el barranco de Aigües Vives y que se trata de una persona joven. En la misma localidad, los bomberos tuvieron que recoger a medio centenar de los niños de una guardería cercana al barranco que se quedaron incomunicados al estar anegados los accesos al centro educativo.

Además de este fallecimiento, el episodio de lluvias tormentosas que ha afectado a la Comunidad Valenciana remitió ayer y dejó a sus espaldas un rastro de colegios inundados, decenas de intervenciones de los bomberos, entre ellas un par de rescates de coches atrapados por crecidas de ramblas, e importantes atascos, principalmente en los accesos a la ciudad de Valencia. El mal estado de la mar forzó el cierre del puerto de Sagunto y el amarre del 90% de la flota pesquera de Valencia, aunque en esta ciudad sí se mantuvo la actividad de los grandes buques.

Las precipitaciones medias registradas en las comarcas valencianas en los últimos siete días han alcanzado los 86 litros por metro cuadrado, una cifra casi un 50% superior a lo habitual, según fuentes del centro de Valencia del Instituto Nacional de Meteorología (INM).

Las organizaciones agrarias destacaron los efectos positivos de las lluvias de los últimos días, especialmente para los cultivos de cítricos, así como el viñedo y el almendro. Pero sobre todo, las lluvias serán beneficiosas para paliar la difícil situación de la Albufera, que debido a las nulas aportaciones hídricas de las últimas semanas presentaba una alta acumulación salina que amenazaba los cultivos de arroz y la supervivencia de la fauna acuática.

El efecto sobre los pantanos, sin embargo, será limitado, ya que la mayor parte del agua caída no se ha recogido en las cabeceras de los ríos, que alimentan los pantanos, sino en las comarcas costeras.