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Ocho asociaciones de Jaén se unen para frenar la construcción de seis campos de golf

La nueva plataforma ciudadana acusa a los ayuntamientos de promover la especulación

Ginés Donaire

Ocho organizaciones agrícolas, sociales, culturales y ecologistas han impulsado la plataforma en defensa del territorio y el agua de la provincia de Jaén, donde muestran su rechazo a los seis proyectos de campos de golf, con urbanizaciones anexas, que se están promoviendo en otros tantos municipios. En el manifiesto presentado ayer los colectivos alertan del impacto paisajístico de estos planes, que consideran contrarios al Plan Estratégico de Jaén, ponen de manifiesto las consecuencias para el agua en la agricultura y censuran a los ayuntamientos por promover la especulación.

La plataforma contraria a los proyectos vinculados a campos de golf y urbanizaciones la forman la Asociación en Defensa de Úbeda Patrimonio de la Humanidad Plaza Vieja, la Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas (COAG) de Jaén, Ecologistas en Acción, la Asociación Amigos de los Iberos, la Sociedad Española de Ornitología (SEO), la Asociación Amigos de los Museos de Castellar, la Asociación Fuente La Reja de Pegalajar, el colectivo Guardabosques de Jódar y el Taller de Ecología de Linares.

En el manifiesto suscrito por todos ellos alertan de que los proyectos que se están promoviendo en Úbeda, Marmolejo, Frailes, Santo Tomé, Chilluévar y Linares "son una amenaza de destrucción de forma irreversible de los recursos naturales, como el suelo, paisaje y agua, además de hipotecar nuestro futuro".

Alberto Sanfrutos, de la asociación Plaza Vieja de Úbeda señaló que los ayuntamientos "se han convertido en meros intermediarios de las empresas constructoras e inmobiliarias, que deciden cómo y cuando se recalifican los terrenos, a cambio de pagos legales o ilegales".

A su juicio, los municipios que apoyan estas propuestas "no se planifican en función del interés general, sino en función de proyectos inmobiliarios y por mandato de los especuladores urbanísticos". Por eso, responsabilizó de esta situación a los ayuntamientos, "por ser los promotores de este modelo especulativo, pero lo será también la Junta si permite y aprueba este tipo de planes urbanísticos faraónicos que nos amenazan a todos".

El caso más llamativo es el de Úbeda, donde el equipo de gobierno compuesto por PP y PA aprobó en julio un proyecto que, además del campo de golf, prevé un complejo hotelero y residencial con la recalificación de 1.290.000 metros cuadrados de suelo rústico y la construcción de 1.159 viviendas.

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Sin reparos

Para los miembros de la plataforma, la operación más frecuente para llevar a cabo estos proyectos es la recalificación de suelo rústico, adquirido a bajo precio, para edificar. "Son recalificaciones que los ayuntamientos asumen sin reparos", señaló Sanfrutos.

Juan Luis Ávila, de la COAG, se refirió a las consecuencias para el agua del campo jiennense, y puso como ejemplo que un campo de golf de 18 hoyos tiene un consumo equivalente al de una población de 15.000 habitantes. "Mientras tanto, los agricultores de Jaén llevan años sin tener concesiones de riego de sus olivos por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir; es una irresponsabilidad propiciar actuaciones que incrementen el gasto de agua", señaló.

Antonio Cabrera (SEO) indicó que estos proyectos "deterioran y contaminan" los hábitats naturales donde se van a instalar, desplazando hacia espacios cada vez más reducidos a las demás especies y provocando pérdidas de biodiversidad.

Pilar Palazón, de Amigos de los Iberos, recordó que en el Plan Estratégico de Jaén no existe referencia alguna a estos proyectos. "Al revés, hay decididas propuestas en favor del ahorro del agua, la racionalización de los riegos, la mejora del entorno urbanístico, el turismo rural y de naturaleza basado en la revalorización de la Red Natura 2000 de Jaén y el apoyo a Úbeda y Baeza como ciudades Patrimonio de la Humanidad", indicó Palazón.

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