El paro alemán cae por debajo del 10% por primera vez desde 2002

La creciente recuperación de la economía alemana provocó en el mes de octubre un impulso del empleo que redujo la tasa de paro por debajo del 10% por primera vez en cuatro años. El índice de desempleo se situó en octubre en el 9,8% (4,085 millones de parados), con lo que volvió a ponerse por debajo de la barrera psicológica del 10% y auguró una pronta reducción por debajo de los cuatro millones, que ya se podría alcanzar el año que viene.

El descenso del paro en octubre fue de 153.000 personas, una cifra que duplica con creces el descenso medio de los últimos tres años, según informó la Agencia Federal de Empleo, que destacó que vuelve a aumentar, después de más de un año reduciéndose, la creación de empleos que cotizan.

"La tendencia actual en el mercado laboral parece estable", declaró en Núremberg el presidente de la Agencia, Frank-Jürgen Weise. Lo que no está claro es qué efecto tendrá sobre el paro la temida subida del IVA, el 1 de enero de 2007, del 16% al 19%. "Eso dependerá sobre todo de en qué medida el comercio minorista consiga trasladar el aumento de precios a los consumidores", declaró Heinrich Alt, miembro de la presidencia de la Agencia de Empleo.

Reforma fiscal por consenso

Por otro lado, el Gobierno alemán consensuó ayer el proyecto de ley de reforma de la fiscalidad empresarial que contempla a partir de 2008 un alivio fiscal para las empresas desde el actual 38,65% a menos del 30%.

El proyecto de ley quiere presentarlo el Gobierno en el próximo mes de enero y deberá ser aprobado antes del verano próximo para que pueda entrar en vigor el 1 de enero de 2008.

La reforma costará al erario público unos 30.000 millones de euros y pretende impulsar la competitividad de las empresas alemanas, incentivar las inversiones y, por último, evitar el flujo de capitales al extranjero.

Al mismo tiempo, se pretende dar un tratamiento similar a las sociedades y a las pequeñas y medianas empresas (el 90% del empresariado) que se rigen por el Impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) cuyo tipo máximo es del 42%. También prevé la reforma rebajar el impuesto de sucesión para las empresas.