Alierta marca como reto a los directivos de Telefónica ingresar 70.000 millones en 2009
El grupo ha alcanzado una cuota del 28% en Latinoamérica y del 11% en Europa
En Telefónica cunde la euforia. El grupo se ha marcado como reto aumentar 30.000 millones de euros los 37.314 millones de ingresos de 2005 en un plazo de cuatro años, con lo que se acercaría a los 70.000 millones en 2009, un objetivo aún más ambicioso que el formulado ante los analistas en mayo. Ése fue el mensaje lanzado ayer por el presidente de la operadora, César Alierta, en la cumbre de directivos de la compañía que reunió a 1.300 ejecutivos de 23 países. La compañía ha alcanzado una cuota del 28% de las líneas en Latinoamérica y del 10,6% en Europa.
Alierta ha podido hablar por fin en una convención sin estar más pendiente de la cotización de los títulos que de las reacciones a su discurso. Tras meses de parálisis bursátil pese la bonanza general de los mercados, la acción de la operadora se ha recuperado, superando los 15 euros, una barrera que no tocaba desde hace cinco años. En este clima propicio, el presidente de la operadora aprovechó la segunda cumbre de directivos, celebrada ayer en Madrid, para lanzar un reto: conseguir aumentar los ingresos anuales en más de 30.000 millones de aquí a 2009.
El grupo ingresó el año pasado 37.314 millones de euros y espera alcanzar los 52.000 millones en este ejercicio, El objetivo de elevar la facturación en unos 30.000 millones en cuatro años es más ambicioso que el compromiso asumido en mayo pasado frente a los analistas, que suponía un crecimiento del 10% al 14% de media anual. Los directivos de Telefónica reconocieron ayer que de los 30.000 millones, hay 25.000 millones asegurados, pero habría que inventarse la forma de conseguir los otros 5.000.
Telefónica se ha situado como la primera compañía de su sector por número de clientes (exceptuando a las compañías chinas), según enfatizó Alierta en su discurso. La firma española es la quinta del mundo en su sector por valor en Bolsa y la primera destacada por deuda, lo que la sitúa como segunda tras AT&T en la suma de ambos conceptos.
El presidente de la operadora insistió en la necesidad de profundizar en la diversificación geográfica que en los últimos dos años ha tenido como exponente las compras de la compañía de móvil O2, la checa Cesky Telecom y la colombiana Telecom. En este sentido, adelantó que la multinacional española cuenta ya con el 28% de cuota de mercado por número de accesos (fijo, móvil e Internet) en Latinoamérica y el 10,6% en Europa.
La convención de directivos sirvió también para ratificar los objetivos presentados ante los analistas en mayo: incremento de la base de clientes el 40% hasta 255 millones de accesos en 2009, elevar los ingresos y el resultado operativo, para duplicar el beneficio por acción y repartir un dividendo de un euro por acción en 2009.
Alierta destacó que Telefónica está en mejor situación que sus rivales porque posee una red comercial de 65.000 puntos de venta, "frente a la limitada estructura comercial de los jugadores de Internet", y el control de las infraestructuras de banda ancha fija y móvil sobre las que se distribuyen todos los servicios y contenidos digitales
En paralelo a ese optimismo institucional, las acciones de la operadora siguen siendo la locomotora del Ibex 35. Ayer fueron las más contratadas en la sesión tras haber rotado más de 46,3 millones de títulos, y marcaron 15,10 euros, con una revalorización del 0,67%.
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