Tercer día de atascos kilométricos por la lluvia en menos de una semana

Volvió a ocurrir ayer para desesperación de miles de conductores. La lluvia caída durante todo el día convirtió la ciudad y sus entradas en un lugar intransitable para los coches. A primera hora de la mañana se volvieron a repetir en los accesos a la ciudad los atascos, que en total sumaron 154 kilómetros. Al aguacero se unió la niebla, que afectó sobre todo al tráfico de la carretera de Burgos a la altura del municipio de Somosierra.

La red de autovías de la región, como ya ha ocurrido dos veces en la última semana, se atascó desde primera hora por el aguacero. La carretera de A Coruña (A-6) registró por la mañana 27 kilómetros de atascos, 22 de ellos en la entrada a Madrid. En dirección salida no se podía circular entre los kilómetros 3 y 8.

"Esta mañana todo era un tapón. Había coches en la carretera de A Coruña que intentaban salirse a la carretera de Castilla o a la M-40 y se ha colapsado todo", contó Lola Oliva, que vive en Sinesio Delgado y que, a pesar de sufrir los atascos, no piensa ni de lejos en dejar el coche aparcado a favor del metro o del autobús.

Precisamente ayer, la Asociación Unificada de Guardias Civiles de Madrid denunció que en la carretera de A Coruña "siguen existiendo puntos negros de tráfico" que ayer causaron "cuatro accidentes en un mismo punto kilométrico, el 47, justo a la salida del túnel de Guadarrama". El sindicato afirmó que ha detectado en la A-6 "un aumento de los siniestros en los kilómetros 47, 34 y 29 de entrada hacia Madrid". "Allí, cuando llueve, el firme no permite el drenaje de la calzada, por lo que se originan grandes bolsas de agua que están siendo causa de numerosos accidentes", señalaron desde el sindicato.

La carretera de Barcelona (A-2) registró en total 15 kilómetros de atascos, siete de ellos de entrada a la capital.

Cualquier pequeño accidente, sumado al aguacero (cayeron 30 litros por metro cuadrado), empeoró todavía más las cosas. Así ocurrió en la autovía M-50, con 11 kilómetros de retenciones por culpa de un coche averiado.

En la carretera de Burgos (A-1) el problema añadido fue la niebla, que causó hasta 46 kilómetros de retenciones entre los kilómetros 50 y 96, a la altura del término municipal de Somosierra.

Los conductores que transitaron por la autovía M-40 a las nueve y media de la mañana se encontraron con 55 kilómetros de atascos en seis tramos distintos, situados entre los kilómetros 12 y 30 y 43 y 58 de esta autovía. Y dentro de la capital, hubo tapón en los clásicos: nudo norte a la altura de la avenida de la Ilustración, la zona este de la M-30, Santa María de la Cabeza o la cuesta de San Vicente.

Otro punto negro fuera de la capital se dio en la carretera M-503, que une las localidades de Villanueva del Pardillo y de Majadahonda, en su unión con la M-40. Allí, a la altura de Pozuelo de Alarcón, hubo cuatro kilómetros de atascos.