Una moderna versión de 'Romeo y Julieta' abre la Mostra

Una versión moderna de Romeo y Julieta y un melodrama con una trama que habría firmado el mismísimo Almodóvar abrieron ayer la sección oficial de la Mostra, todavía con la resaca de la gala inaugural a cuestas. El festival presentó también las publicaciones de esta edición, dedicadas a Roberto Rossellini y Luis Lucia, el día en que El síndrome de Svensson, de Kepa Sojo, comenzaba las proyecciones dedicadas al cine valenciano.

En el día de la resaca tras la gala, tras la cual ningún famoso se quedó al cóctel que se sirvió a su conclusión, ni acudió a la fiesta organizada por el festival, la Mostra de València encontró la panacea para llenar las salas. Ayer, en la sesión para prensa y público de la película francesa Camping sauvage, de Christophe Ali y Nicolas Bonilauri, la sala 4 de los cines UGC estaba llena de estudiantes de ESO que, aprovechando que los más pequeños acudieron a las proyecciones de la Mostreta, llenaron los huecos vacíos. Una manera de sumar espectadores para la estadística.

Los estudiantes, el jurado y la prensa pudieron ver un filme más que interesante, que transita desde el universo del western hacia la tragedia shakesperiana para relatar el amor ilícito entre un cuarentón de cara cuarteada y una joven con cara de lolita y cuerpo de madonna. Ali y Bonilauri explicaron tras la proyección que su intención era "rodar una versión moderna de Romeo y Julieta", para lo que encerraron a todo el equipo en un cámping veraniego durante los dos meses del rodaje. Lo consiguen pese al irregular ritmo narrativo del filme que acusa demasiado su falta de definición.

'Depravación'

Ya no hubo jóvenes en la proyección de Khochkach, de Salma Baccar, la segunda cinta que entró en competición en la jornada de ayer. Cuenta la historia de una mujer casada que acaba enganchada al opio, en forma de infusiones, cuando constata que a su marido le interesa más el vecino que su cuerpo serrano. Un argumento que parece sacado de una película de Pedro Almodóvar, pero que en este filme tunecino desemboca en un melodrama bastante plúmbeo y de discurso reaccionario pese a adoptar el punto de vista de la protagonista femenina: aquí la homosexualidad es una "depravación" y no una opción sexual.

La sección Mostra Cinema Valencia, dedicada al cine producido en nuestra Comunidad Valenciana, se abrió con El síndrome de Svensson, la divertida y destarifada comedia de Kepa Sojo que, pese a pasar por diversos festivales, como Peñíscola o Vitoria, sigue durmiendo en el cajón de algún distribuidor a la espera de ser comercializada. Comedia coral, a medio camino entre Berlanga y el nuevo cine de risas español, El síndrome de Svensson garantiza un rato divertido y contiene, junto a pizcas de sal gorda, algunos gags memorables.

Y para que los espectadores de la Mostra lean algo más que los subtítulos de las películas, el festival presentó ayer los dos libros que publica en esta edición. Roberto Rossellini, de José Luis Guarner, es la reedición de la obra que publicó hace 15 años el desaparecido crítico. Luis Lucia, director para todos los públicos, de Pablo Gantes, recorre la vida y la obra del descubridor de mitos infantiles como Marisol, Rocío Dúrcal o Ana Belén.