Los peritos del ácido bórico negaron en 2000 lo que afirmaron tras el 11-M

Los peritos policiales que vincularon a ETA con los atentados del 11-M en un informe de 2005 con el único argumento de la existencia de ácido bórico -que se emplea como insecticida y desodorante- en la casa de Hassan el Haski, presunto inspirador de los atentados de Madrid, y en el piso franco de unos etarras, firmaron en 2000 un informe en el que despreciaban su peligrosidad. "El ácido bórico no es sustancia explosiva ni incendiaria", aseguraron aquel año Manuel Escribano e Isabel López Cidad.

Este hecho avala la hipótesis de que los peritos, pese a ser conscientes de la inocuidad del ácido bórico, lo utilizaron de mala fe en su informe de 2005 como argumento para sostener la teoría de la conspiración en el 11-M que defiende el PP y medios de comunicación afines. A partir de una sustancia de uso común en miles de hogares que no es "incendiaria ni explosiva", los peritos establecieron la posible vinculación de ETA con el 11-M y defendieron "la posibilidad de que el autor/autores de estos hechos estén relacionados entre sí y/o hayan tenido un mismo tipo de formación y/o sean el los mismos autores".

Escribano y López Cidad están, además, imputados por Garzón por un presunto delito de falsedad en documento público, ya que ambos admitieron que en julio de este año firmaron una copia del informe de 2005. Para el magistrado, la firma del documento más de un año y cuatro meses después de haberlo realizado tenía la intención de "producir un efecto oficial de un documento que nunca lo fue".

Garzón solicitó ayer amparo al Poder Judicial ante los ataques que recibe de medios afines al PP, el diputado popular Jaime Ignacio del Burgo y el vocal conservador del Poder Judicial José Luis Requero.