"El anuncio a favor de las selecciones catalanas refleja la realidad"
Oleguer Presas (Barcelona, 1989) ha pasado de ser uno de los jugadores más utilizados por Frank Rijkaard, al punto que fue incluso titular en la final de París, a jugar muy poco. Desde la ida de la Supercopa, contra el Espanyol, el defensa no era titular hasta el miércoles en Bremen. El jugador azulgrana, que llegó a ser citado por Luis Aragonés para una concentración de España, aunque no debutó, ha expresado siempre su deseo de que la selección catalana pueda disputar competiciones internacionales. Licenciado en Económicas, siempre ha defendido ideas catalanistas y de los movimientos antiglobalización y el pasado mes de marzo presentó el libro Camí d'Itaca, un ameno road movie urbano, en palabras del escritor Ferran Torrent.
"Tener selecciones propias es un deseo legítimo, y ya es hora de que se afronte el debate"
"No hay argumentos políticos que justifiquen que un deportista no pueda elegir libremente"
Pregunta. A buen seguro que está al tanto de la polémica generada por el anuncio de televisión de la plataforma proselección catalana en el que un niño con la roja de España no deja jugar a otro con la de Cataluña? ¿Qué le parece?
Respuesta. Me parece que no hay motivos para que la gente se escandalice por un anuncio que refleja la realidad. Me parece que son ganas de crear polémicas artificiales hablar de que se utilizan niños. ¡Se utilizan niños en casi todos los anuncios y por causas que no son muy justas! Si toca la fibra es porque refleja la realidad de una manera natural e impactante.
P. ¿Por qué cada vez que se habla de las selecciones catalanas se crea tanta polémica?
R. Los que generan la polémica no somos los jugadores, sino el deseo de tener selecciones y el debate político que se desencadena cuando se plantea el tema.
R. ¿Ya sabe que el PP planteará un recurso contencioso administrativo contra la decisión del Consejo Audiovisual de Cataluña (CAC) de no suspender el anuncio?
R. Está en su derecho y, por tanto, sabrá lo que hace.
P. ¿No tiene la sensación de que el debate se ha centrado más en el anuncio que en otra cosa?
R. Tener selecciones propias es un deseo legítimo, y ya es hora de que se afronten debates abiertos sobre esta problemática, de argumentar las razones por la que no se atienden y no se cumplen los deseos de la gente. Todavía no he visto un solo argumento político de verdad que justifique que los deportistas no puedan elegir libremente. La polémica, en cualquier caso, expresa que el proceso avanza, que el deseo de tener selecciones propias es posible.
P. ¿Piensa jugar el partido Cataluña-Euskadi?
R. Me gustaría, pero falta que me convoquen.
P. En Bremen regresó al equipo titular. ¿Qué sensaciones tuvo?
R. Buenas, es lo que todos queremos. Traté de hacer lo que el entrenador me pedía, dar cobertura a los laterales y tapar la banda. En general, estoy satisfecho. También del empate. Siempre es mejor un punto que nada y ese campo es complicado. El curso pasado ya me gustaron mucho.
P. ¿Le extraña la situación por la que está pasando?
R. Sí, siempre te extraña no jugar más porque crees que lo mereces. Pero el míster tendrá sus motivos. Yo creo que tengo un sitio, pero no puedo decir que debo jugar yo porque el que juega en mi sitio piensa lo mismo y también lo merece, seguro.
P. ¿Cómo lleva haber pasado de ser uno de los jugadores más utilizados a uno que apenas tiene minutos?
R. Cuesta asimilarlo, pero se asimila. No hay más que tener la cabeza fría, paciencia y ver con claridad que no se trata de que Rijkaard haya perdido la confianza en ti, sino que utiliza a otros compañeros, simplemente. Prefiero pensar que el próximo partido lo voy a jugar. Por lo menos, trabajo con esa idea.
P. ¿No debilita la ilusión?
R. Debilita en el sentido de que la mejor manera de colaborar con el equipo es jugar. Lo que aportes en el vestuario es importante, pero lo que quieres y lo que te gusta es jugar. Otra cosa es que no puedo bajar la intensidad del trabajo ni la voluntad de aprender cada día. Soy consciente de mi evolución, de que he aprendido mucho en los últimos años y he mejorado una barbaridad, pero también de que puedo seguir haciéndolo y eso me motiva. Otra cosa es que no jugar tanto como querría es un golpe duro cada semana, una decepción. Contra eso, paciencia y tranquilidad.
P. ¿Ha hablado con el entrenador para saber por qué?
R. Estas cosas no se preguntan. El debe escoger y es legítimo que escoja a otros. Además, acierta. Los resultados lo demuestran.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.