Los alcaldes de Castellón y Tarragona reclaman la conexión ferroviaria de AVE

El alcalde de Tarragona, Joan Miquel Nadal (CiU), y el de Castellón, Alberto Fabra (PP), celebraron ayer una reunión que culminó con la firma de un documento para reclamar al Ministerio de Fomento que no se retrase la llegada del AVE a ambas capitales. Sin siquiera abordar el tema del agua, en el que discrepan diametralmente, ambos alcaldes lograron redactar un texto de "apoyo conjunto" a sus reivindicaciones en materia de infraestructuras ferroviarias para dos provincias limítrofes y centrales en el denominado corredor mediterráneo.

El Grupo Municipal Socialista califica la reunión de "acto propagandístico"

La de ayer no fue la primera reunión que mantienen los alcaldes de Castellón y Tarragona, sin embargo, en cuanto a su contenido, marca un hito respecto a las relaciones mantenidas entre los presidentes de los gobiernos catalán y valenciano, que nunca han reclamado infraestructuras comunes.

El único paso dado entre ambas instituciones para aunar posiciones sobre la deficitaria infraestructura ferroviaria compartida entre Cataluña y Valencia se produjo el pasado mes de abril, cuando el consejero de Infraestructuras, José Ramón García Antón, acordó con su homólogo, Joaquim Nadal, defender juntos ante el Ministerio de Fomento y la Unión Europea la prioridad del corredor mediterráneo de alta velocidad para pasajeros y el tráfico de mercancías. Un encuentro producido ante la presión de los empresarios, que insisten en la urgente necesidad de las infraestructuras ferroviarias hasta Francia y en la búsqueda de consenso para lograr que la reivindicación sea más potente.

Ayer, Joan Miquel Nadal y Alberto Fabra firmaron un documento que será trasladado a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, en el que hacen constar que existen varios aspectos en los que coinciden "plenamente". Uno de ellos es el respaldo del alcalde de Tarragona a la reivindicación del Ayuntamiento de Castellón de que el AVE Madrid-Comunidad Valenciana llegue hasta Castellón a lo largo del año 2010. El escrito manifiesta también el "apoyo conjunto" de ambos dirigentes "a la exigencia de que se dote al corredor mediterráneo de tren de alta velocidad con plataforma de ancho europeo, necesario para facilitar el tránsito de personas y mercancías a lo largo del citado corredor y su conexión con el resto de la Unión Europea".

Nadal basó su reclamación en los datos de viajeros que soporta el corredor y que, según dijo, ascienden a cerca de 2,7 millones anuales. El alcalde de Tarragona comparó esta cifra con la de los pasajeros que circulan entre Zaragoza y Madrid, que limitó en alrededor de 1,3 millones. "El primer AVE que se tenía que haber dibujado era el Madrid-Valencia-Castellón-Tarragona-Barcelona pero como eso ya no es posible, entendemos que las cifras hacen necesario que se establezca la conexión marcando unos plazos", señaló Nadal quien admitió que el desdoblamiento de vías que impulsa el Ayuntamiento de Castellón, dejando la del AVE por el interior, plantea un pequeño problema para Tarragona que tendrá que introducir esta segunda línea en su estación. Aún así, el alcalde catalán aseguró que es una cuestión técnica que se puede solventar.

Por su parte, el portavoz adjunto del Grupo Municipal Socialista, Miguel Alcalde, calificó la reunión como un "acto propagandístico, de cara a la galería". Para Alcalde éste es un problema que "ya está solucionado por un gobierno socialista, que se ha comprometido a ejecutar, en el menor tiempo posible, la conexión ferroviaria de alta velocidad entre Madrid y Castellón".

El corredor mediterráneo fue excluido la pasada semana de los presupuestos para las redes transeuropeas, en concreto del proyecto prioritario número 3, que corresponde al eje ferroviario de gran velocidad del suroeste de Europa. Desde que se esbozaron los primeros proyectos de AVE, el corredor mediterráneo ha sufrido una larga cadena de pasividades e inhibiciones por parte de las instituciones. No contemplado por los gobiernos de Felipe González, tampoco los de José María Aznar se esforzaron en incluirlo en el trazado prioritario de las redes transeuropeas de transporte ferroviario, definido por un grupo de alto nivel bajo la presidencia de la popular Loyola de Palacio.

En la actualidad, la conexión ferroviaria entre Castellón y Tarragona sufre una situación de precariedad. Tras la adecuación de Benicàssim, cuenta con un trazado de ancho ibérico hasta Vandellòs, donde una monovía conecta con Tarragona. Los planes de Fomento contemplan un desvío entre Vandellòs y Cambrils, casi ejecutado, que en un futuro, rodeando Tarragona, conectaría con el aeropuerto y una nueva estación central que enlazaría con el AVE Madrid-Barcelona a la altura de Perafort.