60 muertos en Irak en otra jornada de atentados

Cerca de 60 personas murieron ayer en una nueva oleada de atentados en Irak. Bagdad; la región de Baquba, en el centro del país; Kirkuk, ciudad kurda del norte, y Basora, en el sur, fueron los escenarios de los principales ataques terroristas.

Uno de los atentados más graves ocurrió en Bagdad, cuando una bomba escondida en un vehículo estalló al paso de una patrulla policial en una de las calles más concurridas del centro de la capital, y mató a nueve civiles. Otras dos personas murieron en un ataque dirigida contra el periódico gubernamental Al Sabah.

En Baquba, la región más peligrosa de Irak, 11 civiles y un militar perdieron la vida en varios episodios violentos, entre ellos la explosión de una bomba artesanal y varios ataques de grupos armados.

Las sedes de la Unión Patriótica del Kurdistán, el partido del presidente iraquí, Yalal Talabani, fueron el objetivo de otros tres atentados en la ciudad de Kirkuk. Nueve personas murieron y otras 50 resultaron heridas. Dos de los ataques fueron perpetrados por terroristas suicidas y el tercero fue realizado con un vehículo cargado de explosivos. Cuatro policías fueron asesinados en una emboscada en las afueras de esa localidad kurda.

En Basora, segunda ciudad iraquí, situada a 500 kilómetros al sur de Bagdad, un motorista se hizo estallar en un mercado, matando a siete personas.

La nueva oleada de atentados coincide con la celebración de una conferencia para la reconciliación de Irak en la que han participado más de 500 jefes tribales. La conferencia, inaugurada el sábado por el primer ministro, Nuri al Maliki, trata de consensuar una estrategia para frenar la violencia sectaria que azota el país.