Madrid acusa a Andalucía de "favorecer el tránsito de los menores por toda España"
La Junta, que tutela a 844 extranjeros, rechaza replicar al Gobierno de Esperanza Aguirre
El gerente del Instituto Madrileño del Menor y la Familia de la Comunidad de Madrid, Juan José García, acusó ayer a la Junta de Andalucía de "favorecer el tránsito de los menores inmigrantes por toda España", al haber establecido que pasen tres meses antes de ejercer la tutela sobre esos chicos. En la Comunidad de Madrid esa tutela es efectiva desde el momento en que los menores son detectados en su territorio. La Junta de Andalucía rehusó responder a estas acusaciones. En los centros de protección andaluces viven 844 menores extranjeros, una de las ocupaciones más altas, según la Junta.
El gerente del Instituto del Menor madrileño hizo esas declaraciones durante una rueda de prensa, en la que afirmó que muchos de los menores que llegan a los centros de acogida de Madrid "dicen que vienen de centros de Andalucía".
Después, en conversación telefónica, matizó que su crítica va dirigida a la disparidad de criterios con los que las comunidades aplican el deber de tutela sobre los menores inmigrantes. "Hace tiempo que venimos exigiendo que haya una coordinación y una aplicación igual del protocolo de tutela por parte de todo el mundo", puntualizó. "Cuando una comunidad no tutela antes de los tres meses, está invitando al menor a que salga y se vaya a otra [donde se tutela desde antes]".
Luego aclaró que había mencionado el caso de Andalucía porque es la más "significativa" para Madrid, ya que los menores que llegan a esta región proceden sobre todo de Algeciras (Cádiz), Málaga y Almería.
Según García, la mayoría de los menores que entran en la Península tiene entre 15 y 17 años. "Vienen con un proyecto de integración laboral y necesitan un plazo de nueve meses de estancia para adquirir el permiso de residencia. Lo que implica que un chico requiere unos 18 meses para poder ponerse a trabajar", explicó. "Esos tres meses [de plazo hasta la tutela] implican que no corran los plazos para obtener la residencia y eso les lleva a irse a otras comunidades".
Situación dispar
También aseguró que esta situación dispar genera un "efecto perverso": "La comunidad que más recursos pone, como la Comunidad de Madrid, y que de forma más solidaria se comporta, es la que cada vez recibe más chicos, porque entre ellos se va generando la opinión de que en Madrid se está muy bien".
García también recordó que desde hace tiempo la Comunidad de Madrid viene tutelando a muchachos que les consta que proceden de Andalucía. "Podíamos haber dicho que fuera esa comunidad la que siguiera trabajando con ellos y no lo hemos hecho".
La Junta de Andalucía rechazó ayer responder a esas acusaciones y censuró la batalla política que se está generando alrededor de los menores inmigrantes. No obstante, fuentes del Gobierno autónomo recordaron que los menores extranjeros llegan en ocasiones con móviles, dinero y contactos para desplazarse a otras zonas de España o del resto de Europa, donde residen familiares o conocidos. Dado que los centros de protección de menores "no son cárceles", precisó esta fuente, aquellos que optan por irse de forma voluntaria no encuentran impedimento.
Los menores que permanecen en los centros se integran en el sistema de protección andaluz, que no establece diferencias entre extranjeros y españoles. La tramitación de la documentación para regularizar la situación del menor comienza a realizarse desde el momento en que se integra en un centro de protección. La demora en este proceso administrativo varía según las provincias, pero corresponde al Gobierno estatal la concesión del permiso de residencia para el extranjero menor de 18 años. Hasta el pasado 1 de agosto, en los centros de protección de Andalucía residían 844 menores inmigrantes, que representan un tercio del total de los menores protegidos por la Administración autonómica, según datos de la Consejería para la Igualdad y el Bienestar. Este departamento hacía alusión a los desplazamientos de menores en un reciente comunicado en el que informaba de que la cifra de 844 representaba uno de los registros más altos.
"El incremento de las estancias indica un cambio en el proyecto migratorio de estos menores, cuya edad media ha descendido y que ahora optan en su mayoría por permanecer en los centros de forma indefinida y no desplazarse a otras comunidades autónomas o países comunitarios".
[Por otra parte, una embarcación ocupada por 64 personas, entre ellas ocho menores, llegó ayer por la tarde al puerto de Motril (Granada), informa Efe. Dos de los inmigrantes tuvieron que ser atendidos de cortes de arma blanca, se sospecha que por una reyerta durante el viaje].
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