"Encontraremos el modelo por el camino"

Ramon Sangüesa (Barcelona, 1961) es vicedecano de Innovación y Relación de Empresas y profesor de la Facultad de Informática de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC). También es miembro fundador de la Sociedad Catalana de Inteligencia Artificial y del Capítulo Catalán de la Internet Society, así como colaborador de la Fundación i2CAT y del Cercle per al Coneixement. Es experto en innovación y tecnologías de colaboración.

Pregunta. ¿Internet es un medio de innovación?

Respuesta. A todos los niveles: social, científico, tecnológico.

P. A menudo se confunde innovación con aplicación de tecnología.

R. Desde mi papel empresarial, y como puente entre la Facultad de Informática y la creación de empresas, ayudo a la gente a cambiar su forma de pensar para que trabaje en red y se ponga en marcha. Sin embargo, no se trata exclusivamente de impulsar negocios del ámbito tecnológico, sino de aplicar la tecnología para trabajar en colaboración. La mayoría de las empresas catalanas son pymes, están acomplejadas y creen que nunca podrán hacer innovación tecnológica. Algunas de ellas ya la están haciendo, pero se podría ir mucho más allá si se entrase en otro tipo de lógica: menos obsesionarse por la dimensión y más por la conexión y la cooperación.

P. ¿La lógica del trabajo en red?

R. La innovación de verdad pasa por el trabajo en red y que la red crezca y ofrezca resultados a todos sus integrantes. Se trata de compartir conocimiento y aumentarlo a base de colaborar y, en consecuencia, innovar más rápidamente. Por ejemplo, en un blog se puede aprender muchísimo. Ahora bien, para ello la sociedad en general tiene que perder el miedo a conectar con los otros y darse cuenta de la oportunidad que esto representa.

P. Quizá los catalanes seamos algo individualistas.

R. Sí, pero también somos muy pragmáticos.

P. ¿Existen jerarquías en el trabajo en red?

R. No funciona ni jerárquicamente ni de forma plana. En la red, el retorno que obtienes es proporcional a lo que tú has aportado.

P. ¿Cómo se puede ayudar a entrar en esta nueva lógica?

R. Como digo a mis alumnos: "A empezar se empieza empezando". Y por el camino te equivocas y aprendes porque se trata de una cuestión adaptativa. Hace falta una estrategia que vaya desde la persona, pasando por la empresa, hasta el país en red. Por ejemplo, las universidades catalanas tendrían un mayor impacto si supieran trabajar en red: distribuidas por el territorio. De hecho, ¡ya lo están!

P. Cataluña es un país pequeño. Debería ser más fácil crear redes.

R. Sí porque, en el fondo, todos nos conocemos. Nuestro reto es pasar de ser un pais de círculos cerrados a uno de redes abiertas. Y estamos en el camino porque tenemos iniciativas y personas con esta lógica. No puedo ser pesimista en absoluto.

P. ¿Cómo ve la Cataluña del futuro?

R. La fase de queja y desesperación por el país ya la superé. Pienso que no hay que tener un modelo, sino una planificación muy a largo plazo y empezar a trabajar y enredarse. Se han creado montones de institutos y centros tecnológicos y hay que facilitar que vayan creciendo y evolucionando, y ya veremos qué pasará. El modelo lo encontraremos por el camino, ya que se trata de un proceso evolutivo. Tenemos tanto miedo a equivocarnos que nos pasamos la vida planificando y sin acabarnos de decidir, no sea que nos equivoquemos. Y hay que saber arriesgarse. La Administración debe facilitar esta evolución y, de vez en cuando, revisar hacia qué modelo vamos.

P. ¿Qué otras cosas debería hacer la Administración?

R. Es importante que el Gobierno desarrolle bien las infraestructuras de comunicación para que todos los núcleos en red puedan trabajar bien y acompañe a las empresas a crecer fuera. En la Administración catalana, tanto en la presente como en la anterior, veo pequeños indicios de que las cosas se van moviendo.