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Reportaje:

La cenicienta se viste de gala

El Inter, el gran beneficiado del escándalo del 'calcio', se prepara para quitarse la fama de eterno segundón comprando jugadores del descendido Juventus

Eleonora Giovio

"Después de apretarle la mano a un milanista voy corriendo a limpiármela. Después de apretársela a un juventino, cuento los dedos". Peppino Prisco, vicepresidente del Inter desde 1963, era famoso por sus chistes y su pasión por las franjas negras y azules. Soldado en el frente ruso durante la Segunda Guerra Mundial, murió de infarto en 2001 sin ver realizado su sueño más grande: "Me gustaría que los que se crucen conmigo en la calle me gritaran a la cara: 'Peppino, ¡campeones de Italia!".

Muchos se lo hubieran gritado el pasado 26 de julio, cuando la Federación italiana decidió asignar el scudetto 2005-06 -despojando de él al Juventus tras el escándalo del Moggigate- al equipo de Massimo Moratti que llevaba 17 años en el dique seco. Cuando el Inter ganó su último título de Liga, en la temporada 1988-89, el muro de Berlín seguía dividiendo Alemania en dos. Casi dos décadas después, el club milanés, que ha utilizado más de diez entrenadores, se ha gastado unos 650 millones de euros para comprar unos 120 futbolistas y sólo ha ganado una Copa de la UEFA, se encuentra de golpe con el título de Liga.

Sin foto oficial, claro. Pero con la ventaja de jugar la Champions sin pasar por la fase previa. "Celebrarlo es otra cosa, pero este título tiene que motivarnos", dijo hace un par de semanas el técnico Roberto Mancini. Por de pronto, el club de propiedad de Massimo Moratti ha comprado en el bazar del Juventus, que jugará en Segunda la próxima temporada y que, para recortar los gastos, se ha visto obligada a vender a la mayoría de sus estrellas. El Inter, acostumbrado a traspasar sus mejores jugadores a los rivales -Cannavaro se fue a la Juve hace dos campañas y Pirlo al Milan hace cinco- se ha tomado su pequeña revancha, fichando al centrocampista Patrick Vieira, por diez millones de euros y al delantero Zlatan Ibrahimovic, por 25.

"Nacimos de una costilla milanista y hemos llegado hasta aquí pese a haber salido de lo más bajo", decía Prisco refiriéndose a los orígenes del Inter. Ahora, el cuadro de Mancini empieza el curso 2006-07 con dos costillas juventinas y la obligación de ganar y quitarse la fama de eterno segundón. De momento, Moratti, se ha gastado 46,8 millones de euros en seis fichajes: entre ellos, el campeón del mundo Grosso y el argentino Crespo, que ha llegado gratis del Chelsea. El Inter, ya no se enfrentará al Juventus -que está en Segunda y empezará con 17 puntos menos- y el Milan se presentará el día 10 de septiembre en la parrilla de salida de la Liga con ocho puntos menos. Puede que no sean suficientes para un club que ha vivido siempre en un estado de permanente angustia existencial. Algo que todavía padecen los aficionados interistas porque el club, este verano, ha vendido 11.000 abonos menos respecto a la temporada pasada. Cosas del Inter.

Zlatan Ibrahimovic, el día de la presentación como jugador del Inter.
Zlatan Ibrahimovic, el día de la presentación como jugador del Inter.REUTERS

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Sobre la firma

Eleonora Giovio
Es redactora de deportes, especializada en polideportivo, temas sociales y de abusos. Ha cubierto, entre otras cosas, dos Juegos Olímpicos. Ha desarrollado toda su carrera en EL PAÍS; ha sido colaboradora de Onda Cero y TVE. Es licenciada en Ciencias Internacionales y Diplomáticas por la Universidad de Bolonia y Máster de periodismo de EL PAÍS.

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