Zaplana eleva la tensión en el PP al respaldar en Gandia al candidato que no quiere Camps

La guerra de las cenas que se libra en el seno del Partido Popular valenciano tuvo anoche un nuevo episodio. El portavoz popular en el Congreso de los Diputados, Eduardo Zaplana, asistió a la organizada en Gandia para respaldar la candidatura del presidente local, Fernando Mut, a las elecciones municipales del próximo año. El sector del partido afín al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, lleva meses apostando por el relevo de Mut. A pesar de ello, el vicesecretario del PP valenciano, Ricardo Costa, negó que Zaplana mantenga un pulso con los campistas en La Safor.

Fernando Mut, que ocupa la Dirección General de Arquitectura, estaba satisfecho por el éxito de la convocatoria. El peso pesado era Zaplana, pero a la cena en el Hotel Bayrén I, situado en la playa de Gandia, asistieron también el presidente de las Cortes Valencianas, Julio de España; la consejera Gema Amor, una veintena de diputados autonómicos y nacionales; cargos menores del partido y militantes de base hasta alcanzar los 500 invitados, la mayoría alineados en el bando zaplanista.

El sector crítico del PP en Gandia, leal al presidente de la Generalitat y que defiende la candidatura del empresario Arturo Torró a la alcaldía, eludió expresar abiertamente su opinión acerca de la cena y de la presencia de Zaplana. Señalaron, sin embargo, que si el objetivo de la misma era "crear tensión, entonces es negativa, porque perjudica al partido". La aparición pública de Zaplana en un acto tan al norte como Gandia no es un hecho habitual. El portavoz en el Congreso y ex presidente de la Generalitat tiene su feudo en Alicante, cuyos municipios han vivido en los últimos años los mayores enfrentamientos entre sus partidarios y los de Camps. En el caso de Elche, llegaron a las manos.

La cena de anoche, al igual que las que se vienen sucediendo en las últimas semanas, se interpreta como una nueva maniobra con vistas a la confección de las listas municipales y autonómicas para los comicios del próximo año. Los campistas de Gandia alimentaron ayer la idea de que tanto el acto de ayer como la proclamación, unos días antes, de Mut como candidato a la alcaldía por parte de la ejecutiva local había provocado malestar no sólo en la dirección regional del partido, sino también en la calle de Génova de Madrid, sede de la dirección nacional del PP. Esta estableció que la designación de los candidatos debía esperar hasta septiembre. El entorno de Mut rechazó esa interpretación: "Si Madrid no hubiera querido que se celebrara la cena, nosotros no la hubiéramos hecho".

Las figuras más representativas del campismo no se pronunciaron ayer. El vicesecretario del PP valenciano, Ricardo Costa, aseguró que la dirección regional no interpreta la cena como "un pulso", informa Rosa Biot. Costa, en una conferencia de prensa en la que habló de sequía, bromeó diciendo que si tuvieran que valorar todas las cenas que se organizan en agosto en territorio valenciano "no acabarían". La opinión de los campistas, de todas formas, es conocida. Cuando el PP de Gandia proclamó a Mut candidato a la alcaldía de Gandia, el presidente provincial de Valencia, Alfonso Rus declaró: "Como si se postula para fallera mayor".