Una pelea entre jóvenes de Ayamonte y futbolistas de un torneo amistoso concluye con destrozos en un hotel

Medio centenar de jóvenes con edades comprendidas entre los 18 y 25 años protagonizaron en la madrugada del domingo una pelea en Ayamonte (Huelva) que acabó con importantes destrozos en el mobiliario urbano y en un hotel. Algunos jóvenes resultaron heridos por golpes e impactos de los objetos lanzados y requirieron atención médica. También un menor alemán de 17 años se encuentra ingresado con heridas muy graves en el hospital Puerta del Mar de Cádiz, tras ser golpeado por una decena de chicos en Conil de la Frontera durante la madrugada del domingo. El herido sufre un traumatismo craneoencefálico, informa Europa Press.

La riña de Ayamonte se produjo entre jugadores de varios equipos de fútbol playa, llegados de diferentes puntos de Andalucía para disputar un torneo amistoso, y jóvenes de la localidad, según fuentes de la Policía Local. El torneo fue suspendido tras los incidentes violentos.

La reyerta se inició en la calle Médico Rey García, en la zona de la movida. Un grupo de jóvenes de Ayamonte comenzó a increpar a los integrantes del equipo de fútbol por causas que se desconocen, según la Policía Local. De forma inmediata se formó un tumulto que subió de tono hasta convertirse en una batalla campal, en la que se arrancaron papeleras y elementos del mobiliario urbano.

Los jugadores emprendieron a toda prisa el camino hacia el hotel Don Diego, en el que se hallaban alojados, pero se mantuvo el enfrentamiento durante el kilómetro de distancia que separa la zona de la movida del establecimiento, lanzándose piedras y objetos de todo tipo, según el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Ayamonte, Enrique Pérez Castillo.

Los jugadores del equipo de fútbol accedieron al hotel y el resto entró por la fuerza a pesar de la resistencia presentada por los agentes. "La pelea se desarrolló en los pasillos del hotel, en el interior de algunas habitaciones, en cualquier dependencia había chavales rodando por los suelos", relató ayer el recepcionista del local, que no quiso hacer público su nombre. Y agregó: "Rompieron los cristales, las papeleras, las macetas, se lanzaron ceniceros y todo lo que encontraban a su paso. Esto parecía la guerra. Había sangre en el suelo y en las paredes, aunque afortunadamente no ocurrió nada grave". El recepcionista añadió que, tras el suceso, el 60% de las personas hospedadas decidieron abandonar el hotel. "A nadie le agrada asistir a las tres de la madrugada al espectáculo que ayer se vivió aquí", explicó.

La intervención de los agentes logró finalmente dispersar a los grupos. La Policía Local no ha efectuado aún ninguna detención pero tiene identificados a algunos participantes en la pelea.