La escultura 'Dreamscape' desató el terror
Dos muertos y tres heridos al soltarse la escultura hinchable en un parque inglés
Dos mujeres murieron y 13 personas resultaron heridas el domingo en la instalación Dreamscape (Paisaje de sueños), una escultura inflable del artista británico Maurice Agis, de 74 años, en el Riverside Park, en la localidad de Chester-le-Street, en el noreste de Inglaterra. Dreamscape -de cinco metros de altura y cuyo tamaño equivale al de la mitad de un campo de fútbol- se soltó de parte de sus anclajes por un golpe de viento y se desplazó hacia arriba cerca de 45 metros en el aire, arrastrando consigo a las más de 30 personas que estaban en su interior, incluido Agis.
"Todo ocurrió cuando empezó a levantarse como un globo", relató Mark Spooner en un programa televisivo de la BBC. "Cayeron cuerpos por todas partes. Y entonces pareció dar una vuelta de campana en el aire".
Las dos víctimas -Elizabeth Anne Collings, de 68 años, y Claire Furmedge, de 38- paseaban con niños por la instalación cuando pasó.
Rosie Wright, una niña de tres años que iba con su madre y su hermano, resultó gravemente herida. Lee Wright, padre de Rosi, ha comentado a The Times que el paraje quedó "como arrasado".
Aunque ha habido alguna sugerencia sobre la posibilidad de que el calor de estos días hubiera calentado el aire hasta niveles peligrosos convirtiendo la escultura en un potencial globo aerostático, la policía no descarta la posibilidad de un sabotaje, la acción deliberada de unos vándalos que rompieran los anclajes.
"Maurice está sufriendo muchísimo", aseguraba Paloma Brotons, la novia de Agis, y señaló que el artista no entiende qué ha podido pasar, ya que habían puesto más sujeciones de las necesarias..
Según la página de Internet de Agis, Dreamscape está fabricada con láminas muy finas de plástico translúcido y dividida en cubículos de colores, la obra se convierte en un laberinto móvil en el que los visitantes interactúan con paisajes cambiantes y en evolución constante pero que recuperan inmediatamente la forma.
Su objetivo, además de estético, es estimular los sentidos del espectador, que pueda relajarse y olvidar el caos y el estrés de la vida urbana. "Quienes la visitan se convierten en parte de la obra de arte, un elemento interactivo que es, a la vez, sujeto y objeto de la experiencia", añade. La información aclara que antes de entrar a la escultura, los visitantes tienen que descalzarse.
Dreamscape se ha presentado con bastante éxito desde 1996 en el Reino Unido, España, Italia y Dinamarca. Otras obras de Agis han recibido buenas críticas en exposiciones celebradas en Australia, Holanda y Estados Unidos.
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