El movimiento pacifista pide que la primera ley de la próxima legislatura sea la del Instituto Catalán por la Paz
Un total de 178 activistas de movimientos pacifistas expresaron ayer, en un manifiesto, su voluntad de que la primera ley que el Parlament apruebe en la próxima legislatura sea la que significará la creación del Instituto Catalán Internacional por la Paz. Un nuevo organismo cuyas tareas consistirán, según explicó Tica Font, de Justícia i Pau, será "investigar, formar y difundir" los valores pacifistas en Cataluña. Todo ello con el anhelo de convertirse en un observatorio para prevenir guerras y episodios violentos, y consolidarse como mediador de conflictos y procesos de paz.
La convocatoria de elecciones anticipadas para otoño ha supuesto un freno para este proyecto. "Es necesario aprobar lo más rápido posible" la ley para que así el Instituto por la Paz "pueda empezar a trabajar en 2007". Este proyecto ya fue aprobado por el Gobierno catalán y lo único que resta pendiente es que el Parlamento haga lo mismo. Para lograrlo, los firmantes entregaron ayer el manifiesto al consejero de Relaciones Institucionales, Joan Saura. En los próximos días lo enviarán al presidente del Parlament y a los grupos de la cámara.
La presentación del manifiesto sirvió para recordar que con el estallido de un nuevo conflicto en el Oriente Próximo, el movimiento pacifista catalán ha vuelto a intensificar más sus acciones. Tras la manifestación que se celebró el jueves por la noche en diversas ciudades catalanas, está previsto continuar con las movilizaciones durante los próximos días. Entre ellos, una cacerolada para el próximo jueves.
El manifiesto coincide con una fecha simbólica para el movimiento pacifista catalán. Este año se celebra el 20 aniversario de las movilizaciones que suscitó el referéndum de la OTAN.
