_
_
_
_

Eurotunnel se pone bajo tutela judicial al no conseguir un acuerdo con los acreedores

El grupo franco-británico tiene un agujero de 9.100 millones de euros

El intento de reestructuración de la deuda de 9.100 millones de euros que ahoga al grupo franco-británico Eurotunnel ha fracasado, por el momento. La mayoría de los acreedores estaban dispuestos a aceptar una reducción del 50% en sus facturas, excepto el principal de todos ellos, Deutsche Bank. Jacques Gounon, el presidente de la empresa propietaria del túnel, pidió ayer al Tribunal de Comercio de París la activación del procedimiento de salvaguarda, que permite que una empresa siga funcionando bajo supervisión judicial sin declararse en suspensión de pagos. El tribunal se pronunciará el próximo día 25. La empresa ha garantizado la continuidad del servicio, pase lo que pase.

Los problemas de Eurotunnel tienen su origen en el mismo momento en el que se crea la empresa que debe llevar a cabo el soñado proyecto de agujerear el canal de la mancha y unir Gran Bretaña con el continente. Se calcula entonces que el coste de la obra se situaría en 7.320 millones de euros, cuando en realidad acabó costando 13.720 millones. La explotación, por otra parte, también fue inferior a la esperada. Una cosa y otra han contribuido a generar los 9.100 millones de deuda. Nadie duda, sin embargo, que Eurotunnel será un buen negocio. De hecho lleva varios ejercicios con beneficios.

El problema es que, como si se tratara de un país del Tercer Mundo, el pago de los intereses de la deuda es siempre superior a los beneficios. Al margen de sus obligaciones con la deuda, Eurotunnel alcanzó el año pasado un margen operativo del 55%.

Con este argumento, la actual dirección intentó convencer a los acreedores de que aceptar una reducción del 57% la deuda de Eurotunnel, que quedaría en 3.870 millones de euros, compensándolo con "títulos híbridos": obligaciones reembolsables en acciones por valor de 1.860 millones, 400 millones más de lo establecido en el compromiso firmado en mayo con los acreedores principales. Una solución, a costa de los accionistas, cuya participación se reduciría un 13% en favor de los acreedores.

El plan contaba con el beneplácito de los grandes acreedores de Eurotunnel: Macquarie, Goldman Sachs y Barclays, pero no del banco Deutsche Bank, que controla el 25% de la deuda subordinada de Eurotunnel, lo que le da una minoría de bloqueo.

En su comparecencia ante los medios de comunicación, Gounon mostró su sorpresa por la actitud de Deutsche Bank y dijo estar muy decepcionado. "No entiendo cómo una institución como Deutsche Bank ha mantenido sus irracionales exigencias sin tener en cuenta sus consecuencias sobre los 2.300 empleados de Eurotunnel y sus 800.000 accionistas", dijo. "Ya no tengo nada que negociar con los acreedores", proclamó. El presidente de Eurotunnel considera que la oferta del grupo es imposible de mejorar porque va "casi más allá de lo razonable", y atribuye la actitud del banco alemán al hecho de que, debido a que Eurotunnel firmó el pasado 23 de mayo un acuerdo con los principales tenedores de la deuda, algunos de los acreedores subordinados -representados por Deutsche Bank- tienen ahora expectativas más ambiciosas.

El Tribunal de Comercio de París tiene hasta el próximo día 25 para decidir si acepta la salvaguarda. En este caso, la actual dirección de Eurotunnel mantendría sus cargos y los reembolsos de deuda quedarían congelados para permitir a los expertos judiciales que medien en busca de un acuerdo entre los acreedores. Según Gounon, incluso con la salvaguarda, si el compromiso que pueda conseguir no es avalado por la asamblea de accionistas, prevista para finales de septiembre, Eurotunnel se vería abocada a la suspensión de pagos y posteriormente a su liquidación.

El Gobierno francés salió en defensa de los pequeños accionistas, que forman una parte importante del accionariado. El ministro de Transportes, Dominique Perben, animó a las partes a "continuar sus discusiones y tratar de encontrar las salidas más favorables posibles, y en particular que preserven los derechos de los pequeños accionistas". Los sindicatos, por su parte, apoyan la actuación de Gounon al buscar el procedimiento de salvaguarda.

Jacques Gounon.
Jacques Gounon.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_