El gestor de Marbella admite que los servicios están al límite

El presidente de la gestora del Ayuntamiento de Marbella, Diego Martín Reyes, admitió ayer que los servicios públicos de la ciudad malagueña se encuentran en una "situación límite". La crisis afecta a todas las delegaciones, pero en especial a la limpieza. Martín Reyes se comprometió a "arañar de otras partidas" y "retrasar pagos". Medio millar de contenedores permanece sin recoger en las calles.

El consejero de Turismo y candidato del PSOE a la alcaldía de Marbella, Paulino Plata, anunció ayer que el Consejo de Gobierno aprobará el próximo martes un crédito extraordinario de 100 millones para hacer frente a la grave situación financiera de Marbella, que arrastra una deuda de 500 millones gestada durante los pasados mandatos de los ediles gilistas.

El dinero llegará previsiblemente entre septiembre y octubre a través de la Ley de Anticipos Reintegrables, lo que supone que la extrema austeridad impuesta por la gestora desde su llegada se prolongará al menos durante otro trimestre. "Al final nos salvaremos nosotros mismos porque será en forma de créditos. La ayuda está amarrada pero aún hay que gestionar los flecos", explicó Martín Reyes.

El pleno extraordinario y urgente celebrado ayer autorizó al presidente de la gestora a solicitar el aplazamiento de la deuda con Hacienda y Seguridad Social. De este modo, podrán optar a un adelanto de los fondos de Participación de Ingresos del Estado, que supondrían 12 millones de euros. Por otro lado, la Diputación de Málaga ha prometido unos fondos transitorios para aliviar la presión.

Servicios esenciales

"Hasta ahora todo son buenas palabras y pocos hechos. La Junta nos obliga a un auténtico encaje de bolillos hasta octubre y me parece una absoluta irresponsabilidad tras tantas promesas", denunció el vocal de Economía y Hacienda, Carlos Rubio, acerca del retraso en el anuncio oficial para las ayudas económicas del Gobierno regional. "Podemos seguir con la misma precariedad que hasta ahora, pero hay servicios esenciales que no pueden sobrevivir sin nuevas inversiones", añadió.

Los servicios de limpieza sólo pudieron disponer ayer de seis camiones para recoger la basura. Más de 500 contenedores rebosaban bolsas en el centro histórico, Las Chapas y Nueva Andalucía. "El panorama es absolutamente insostenible y crítico. El parque móvil está totalmente obsoleto", censuró la vocal de Limpieza, Silvia Cabrera.

El 90% del parque móvil está en continua reparación y los vehículos que aún funcionan realizan tres turnos diarios. Cabrera alertó ayer del riesgo de incendios y de infecciones que la exposición prolongada de basuras en las calles supone para la población, además del notable perjuicio para la imagen turística de una ciudad en pleno aluvión de visitantes.