López Obrador recurrirá el resultado electoral ante el Supremo
Andrés Manuel López Obrador anunció que acudirá a la Corte Suprema de Justicia de la nación para garantizar la limpieza de las elecciones presidenciales del 2 de julio, que ha ganado por un estrecho margen el candidato conservador, Felipe Calderón. Afirmó que en paralelo presentará ante el Tribunal Federal Electoral (Trife) las pruebas que, según él, demostrarían que fue víctima de una acción fraudulenta que le restó votos ilegalmente.
López Obrador sostuvo que la coalición izquierdista Por el Bien de Todos acudiría primero al Trife, encargado constitucionalmente de validar las presidenciales, para pedir que cuente voto por voto para garantizar la limpieza de la elección. Pero, señaló, que también recurrirá a la Corte para denunciar y probar la intromisión del presidente Vicente Fox en la campaña, así como que Felipe Calderón rebasó el tope de gastos de campaña.
En rueda de prensa ante decenas de corresponsales extranjeros, sostuvo que las presidenciales de México fueron una muestra "de la historia de lo que ha sido el fraude electoral", por lo que buscará que se limpie el proceso.
Los recursos de impugnación ante el Trife comenzarán a presentarse el domingo, mientras que todavía no tiene fecha para elevar sus quejas ante la Corte Suprema. Aseguró que posee datos de cómo se utilizó al aparato de Gobierno en estados como Guanajuato y Jalisco, gobernados por el PAN, para beneficiar al candidato conservador, que también habría aprovechado el uso legal de programas asistenciales.
Las pruebas necesarias
López Obrador afirmó que presentará todas las pruebas necesarias al Tribunal Federal Electoral (Trife) para demostrar que es el verdadero ganador y no Calderón, a quien acusó de no respetar la legalidad. El candidato conservador y el Instituto Federal Electoral (IFE) "dan como un hecho [la declaración de un ganador en las presidenciales] algo que legalmente todavía no ha sido determinado", sostuvo, al señalar que pedirá el recuento de más de 41 millones votos, porque está seguro de que "hubo incontables irregularidades" que le restaron sufragios por todo el país.
López Obrador reafirmó que funcionarios del IFE manipularon el cómputo preliminar el domingo y el lunes y el recuento de actas el martes y el jueves para favorecer a Calderón. Insistió en que la del 2 de julio fue una jornada fraudulenta, porque el oficialista Partido Acción Nacional (PAN) "aprendió todas las prácticas del Partido Revolucionario Institucional (PRI, que gobernó México autoritariamente 72 años) y la superó".
En todo momento, rechazó ser un factor de desestabilización política en el país y destacó que las demandas que presentará ante la Suprema Corte y el Trife se dan en el marco de la ley, pues son las instancias legales para dirimir estos conflictos. Sostuvo que "sin democracia no hay estabilidad" y acusó a Calderón de tratar de "intimidar" al pueblo con sus festejos de ganador.
