La M-30 le espera en el buzón

Quien viva en Latina o Carabanchel ya lo tiene en el buzón. El resto de los madrileños con casa puede esperarlo con los brazos abiertos porque está al caer: es un DVD, lo envía el Ayuntamiento y su título no deja lugar a dudas: ¿Quiere ver cómo va a quedar la nueva M-30? El gobierno municipal está convencido de que la mayoría sí quiere, y por eso ha gastado 510.000 euros -aunque el 80% lo pagan las empresas constructoras, descontándolo de sus contratos- en producir y distribuir por toda la ciudad un millón de vídeos sobre su obra más emblemática. La oposición denuncia que esto es pura y dura propaganda. El Ayuntamiento replica que los ciudadanos tienen "derecho a saber qué se hace con su dinero y por qué".

El DVD de la discordia dura 23 minutos y 26 segundos. Casi media hora en la que los técnicos de la Concejalía de Urbanismo han diseccionado la obra de ingeniería más compleja y más cara -4.600 millones de euros a pagar en 35 años- acometida nunca por una Administración local en España. El precio no se menciona en el vídeo, pero sobre el alarde técnico hay amplio despliegue: cada una de las 20 actuaciones de reforma de la carretera de circunvalación está explicada con detalle casi milimétrico; cada nuevo túnel, carril de tráfico, conexión con carreteras nacionales o recuperación de espacio verde se ofrece al ciudadano espectador desde todos los ángulos.

Ni el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ni la concejal de Urbanismo, Pilar Martínez, ni ningún otro dirigente del PP -y ni siquiera las siglas del partido- aparecen en la grabación. No se ven sus caras, ni se mencionan sus nombres, ni se les da voz para vender su proyecto. "Hemos revisado el vídeo a fondo dos veces para que no se colara nada que pudiera tacharse de electoralista o calificarse como propaganda", subraya la concejal Martínez. Eso sí, el relato puramente técnico está cuajado por comentarios como el que encabeza el DVD -"Madrid Calle 30, un proyecto de transformación urbana"- u otros destinados a ensalzar el "amplio proceso de participación" que supuestamente ha acompañado a la obra. Varias veces se recuerda que el proyecto implica un "plan de reforestación" con la plantación de 250.000 árboles, y sin embargo nada se dice de la tala previa de más de 15.000 ejemplares.

"La modernización de la M-30 se configura como uno de los grandes ejes del proyecto de ciudad que desarrolla el Ayuntamiento de Madrid", se escucha en un momento dado al narrador. Un "nuevo modelo de movilidad" que la voz en off aprovecha para señalar otras acciones de gobierno ajenas a la M-30: "Mejora de los autobuses, modernización de estaciones de metro, intercambiadores...". "Hay que contextualizar el proyecto", se defiende la edil de Urbanismo. Se hace mención incluso a la "racionalización del uso del vehículo privado mediante sistemas de regulación del aparcamiento", mientras en pantalla aparece la imagen de un madrileño pagando feliz su tique en un parquímetro.

La reforma de la M-30 consta de 20 actuaciones en cuatro tramos del anillo: norte, sur, este y oeste. La estrella es, por supuesto, el tramo oeste, la alfombra verde junto al río: el soterramiento de seis kilómetros de carretera bajo el río Manzanares, que permitirá llegar a pie desde los jardines del Campo del Moro hasta la Casa de Campo. Con imágenes reales del "ahora" -atascos permanentes, contaminación, ruido, un río "perdido" para los ciudadanos- y recreaciones virtuales del "después" -un gran parque público de un millón de metros cuadrados, pasarelas peatonales, el Manzanares "recuperado"-, el DVD muestra los detalles de una actuación en la que el Ayuntamiento quiere resumir el proyecto.

De todas las obras radiografiadas, están terminadas a día de hoy las de los nudos de La Paloma, Costa Rica, avenida de América y conexión con la A-3, además del túnel de O'Donnell. Falta el grueso de la operación: el doble túnel para sortear el nudo sur y el proyecto del río. "Mejor explicarlas ahora. Si hubiéramos esperado a inaugurarlas todas antes de las elecciones, ahí sí que nos habrían acusado de electoralistas", concluye Martínez.