Escritores y profesores analizan en un libro el carácter singular de la poesía de Ruiz Amezcua
Muñoz Molina, Fernán-Gómez y García de la Concha participan en la publicación
Una treintena de escritores e intelectuales se dan cita en la obra Singularidad en la poesía de Manuel Ruiz Amezcua (Diputación de Jaén, 2006), donde se analiza de forma pormenorizada la trayectoria y la producción del poeta jiennense. A Manuel Ruiz Amezcua (Jódar, Jaén, 1952) lo califican de muy diversa manera: "poeta irremediable" (Fernando Fernán-Gómez), "poeta realista y social" (Pedro Martínez Montávez), "poesía de ideas" (Víctor García de la Concha) o "voz personal, distinta y nítida" (Carlos García Gual).
El análisis de la obra de Ruiz Amezcua se abre con la carta que, en enero de 1975, remitió Leopoldo de Luis al poeta jiennense a propósito de su primer libro, Humana raíz. "Hay en tu libro poemas espléndidos, de tensión, de expresividad, de fuerza", para destacar a continuación "la sangre que circula por todos ellos y que es la que va a impulsar, sin duda alguna, poemas futuros dignos del poeta sin vuelta de hoja que ese libro proclama".
Esos vaticinios acabarían cumpliéndose, pues a partir de ahí, Ruiz Amezcua ha publicado otros 14 poemarios, además de un libro de ensayos (El lenguaje tachado), una Antología esencial de Federico García Lorca, el estudio Cervantes, otra mirada al mundo: La Gitanilla, y un Lorca para escolares, todos publicados en Barcelona por la editorial Octaedro.
El coordinador de esta edición (ampliada al primer esbozo del año 2003), José Francisco Ruiz Casanova, de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, se refiere al carácter "excepcional" que confiere a la trayectoria de Ruiz Amezcua: "no cejar en su poética y buscar -o convocar- con empeño aquellos lectores que, a pesar de los oscuros nubarrones del fatalismo editorial, siguen leyendo poesía. Hacer esto, y hacerlo desde provincias durante tres décadas es prueba más que cumplida de dicha determinación".
Contra la sumisión
Para el profesor Ruiz Casanova, los versos del poeta jiennense "no corresponden a la formalidad pretendidamente histórica crítica y canónica" de la historia de la poesía española. El propio autor corroboraba su distanciamiento del oficialismo poético en su libro El lenguaje tachado (2001), cuando decía: "Peor que el poderoso es el que lo adula; quien escribe y oculta, y no ilumina, sino que esconde, y se esconde". Y añadía: "Una de las muchas cosas que nos enseñan siempre los grandes poetas es una moral contraria a la sumisión".
Uno de los escritores que analiza con mayor profusión de datos la trayectoria de Ruiz Amezcua es el académico ubetense Antonio Muñoz Molina. Los dos coincidieron en el mismo instituto y, más tarde, en la pensión madrileña a la que el entonces joven poeta jiennense llegó con el borrador de un libro buscando un editor. Muñoz Molina recuerda que ya en sus tiempos de estudiantes Ruiz Amezcua tenía "un cierto prestigio de excentricidad o rareza" y añade que, pese a su condición de principiante, "mostraba una arrogancia impávida, una seguridad en sí mismo que excluía toda vacilación y todo compromiso".
Respecto a las influencias que ya dejaba entrever la poesía de Amezcua, Muñoz Molina apunta a Quevedo, Miguel Hernández, Blas de Otero e incluso Unamuno. Sin embargo, subraya: "Lo que no había era ni un residuo de las modas contemporáneas, de los modos de escribir más del día, a lo que era impermeable". Por el contrario, añade el académico su poesía "trataba de los temas fundamentales de la experiencia humana, la vida, la muerte y el amor".
Otro paisano del poeta jiennense, el arabista de la Universidad Autónoma de Madrid Pedro Martínez Montávez, centra su análisis en el poema Recuerdo dañado, incluido en el último poemario de Ruiz Amezcua, Contra vosotros (Octaedro, 2005). Martínez Montávez destaca de este poema la integración que Amezcua hace del tiempo-instante y del tiempo-sucesión, "conservando cada uno de ellos su propia enjundia y entidad".
El libro recoge también el diálogo que el autor mantuvo con la escritora Fanny Rubio en el Círculo de Bellas Artes de Madrid durante la presentación de Contra vosotros.
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