Rajoy rompe con el Gobierno y retira su apoyo al proceso para el fin de ETA

Mariano Rajoy, el líder del PP, anunció ayer en el Congreso la "ruptura de toda relación con el Gobierno" y la retirada del apoyo de su partido al proceso iniciado por el Ejecutivo socialista para lograr el fin de ETA.

Rajoy justificó su decisión en la "ignominiosa" reunión que los socialistas vascos han anunciado con Batasuna: "Estamos hablando de la legalización de hecho de Batasuna, de su reconocimiento como interlocutor válido, de compartir con ETA el diseño del futuro de España y del País Vasco". Rajoy pondrá todo el empeño en que no se consume dicha reunión, que calificó como "un grave atentado contra el ordenamiento jurídico".

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, le pidió que rectificara y se uniera al consenso para intentar erradicar la violencia: "La paz y los ciudadanos merecen el máximo esfuerzo de sus partidos políticos. Lo que no merecen es romper nada entre los demócratas". Rajoy acusó a Zapatero de pagar un precio político a los etarras al aceptar el diálogo político con Batasuna, algo que el líder socialista negó rotundamente: "Hay bases políticas para abordar un proceso de paz, que nunca tendrá precio político y cualquiera que lo afirme mentirá".

Zapatero pide al líder del PP que rectifique y que se sume al consenso para lograr la paz

El presidente recuerda que Aznar dialogó con Batasuna y acercó a Euskadi a 143 presos etarras

El resto de grupos del Congreso apoya al Ejecutivo para iniciar las conversaciones con la banda

Zapatero recordó que, en la tregua de 1998, el Gobierno de José María Aznar habló en secreto con líderes de Batasuna, "pese a que su Mesa Nacional estaba en prisión", y "decidió el acercamiento de 143 presos" sin que nadie le acusara de pagar un precio político por la paz. Todos los grupos, excepto el PP, apoyaron al Gobierno para que inicie el diálogo con ETA.