Un policía local de paisano mata de un tiro a un hombre que le robó 24.000 euros

Un policía municipal de Getafe, de 38 años, de paisano y que estaba fuera de servicio, mató ayer de un disparo en la cabeza a un presunto ladrón, Luis Samuel Velasco Valdizán, de 29 años, que le atracó a la salida de una sucursal bancaria de Parla, de la que acababa de sacar unos 24.000 euros. El agente fue abordado por dos hombres de origen suramericano que le hirieron con un destornillador de grandes dimensiones y le asestaron varios cortes en el cuello y el pecho. El agente sacó una pistola y comenzó a disparar. Uno de los cinco tiros le entró por la cara a uno de los asaltantes y lo mató.

Los hechos ocurrieron sobre las dos de la tarde en la calle del Río Guadiana, en la zona noroeste de Parla. El policía municipal, que trabaja en el turno de noche, acababa de sacar 24.000 euros de una sucursal del BBVA que hay en la confluencia de las calles de Fuenlabrada y Río Guadiana. El agente salió caminando por esta última vía en dirección a una sucursal de Caja Madrid que está en el número 17, a unos 50 metros del primer banco, en un barrio de reciente construcción.

De repente, se le acercaron dos hombres corpulentos que se abalanzaron sobre él y comenzaron a herirle con un destornillador de grandes dimensiones. Uno de ellos le agarró por el cuello con la intención de asfixiarlo. Después le tiraron al suelo y comenzaron a patearle y darle golpes por todo el cuerpo. Uno de los asaltantes cogió el destornillador y le asestó dos profundos cortes desde el cuello hasta el abdomen. "¡Mátalo, mátalo!", le dijo uno de los agresores al otro, mientras no paraban de darle patadas por todo el cuerpo.

Al ver las intenciones de los atacantes, el agente logró zafarse unos instantes y sacar la pistola del calibre 9 milímetros Parabellum que llevaba. Desde el suelo efectuó al menos dos disparos, según fuentes de la investigación. Uno de los tiros le entró a uno de los atacantes por la cara, a la altura de la sien, y lo mató en el acto. De gran corpulencia y muy musculoso, el fallecido iba vestido con unas zapatillas de deporte, un pantalón azul oscuro y una camiseta blanca.

"Todo ha sido muy rápido. Al principio nos parecía que se trataba como de ruido de petardos, pero, cuando nos hemos girado, hemos visto a un hombre con una pistola que no paraba de pegar tiros", señaló Anastasio García, obrero de un edificio en construcción situado frente a la sucursal bancaria.

El otro asaltante salió corriendo y se tiró de cabeza al interior de un Volkswagen Golf de color marrón oscuro o negro que estaba aparcado en segunda fila en la calle del Río Guadiana, frente a la sucursal de Caja Madrid. En el interior había una tercera persona al volante que estaba esperando a los dos asaltantes. El policía municipal se incorporó y siguió disparando al turismo mientras éste emprendía su huida a toda velocidad. El agente no paró de gritar "¡Cuidado! ¡Cuidado!" para que nadie se metiera en la línea de disparo.

El policía, pese a la gravedad de las lesiones que sufría, salió corriendo tras el vehículo por la contigua calle de Aranjuez y después giró por la de Leganés, en un intento desesperado de cazar a los fugados. Éstos lograron arrebatarle los 24.000 euros que acababa de sacar. Durante el forcejeo se cayó el sobre en el que iban los billetes y el ladrón que huyó se apropió de ellos. Fuentes de la investigación señalaron que el arma que utilizó el agente era particular, pero que la había registrado ante la intervención de armas de la Guardia Civil. El ser policía municipal le permite tener una segunda arma para cuando esté fuera de servicio. "Los atracadores le agarraron del cuello, le patearon y le pincharon, y si no se llega a defender no sé lo que hubiera pasado", comentó el concejal de Seguridad de Getafe, el socialista David Lucas.

"El policía, a los pocos minutos de salir corriendo, volvió al ver que no podía detenerlos. Todo ha sido muy rápido", señalaron unos ferrallistas de una obra próxima que se tiraron al suelo al oír los disparos.

El agente se encontraba muy nervioso tras lo sucedido. "He tenido que tirar de pistola porque, si no lo hago así, me matan a mí", comentó instantes después a los responsables de la sucursal de Caja Madrid y a los familiares que se desplazaron al lugar de los hechos. Algunos testigos afirmaron que el atracador que entró en el Golf por la ventanilla había resultado herido en el hombro izquierdo de un disparo. Los agentes del Grupo VI de Homicidios, que se encargan de las investigaciones de este caso, están estudiando este extremo.

Al lugar de los hechos se desplazaron dos UVI móviles del Summa, según una portavoz de Emergencias 112. Cuando llegaron los facultativos sanitarios, el presunto atracador que recibió el tiro en la cabeza había muerto, que iba indocumentado. Los especialistas de la Brigada de Policía Científica estaban a la espera de cotejar sus huellas para ver si había sido detenido recientemente. Las pesquisas policiales apuntan a que se trata de una banda de ladrones peruanos.

A última hora de la tarde, los agentes de Policía Científica identificaron a la víctima mortal. Se trata del peruano Luis Samuel Velasco Valdizán, de 29 años. El fallecido tenía numerosos antecedentes policiales por infracción a la Ley de Extranjería, tentativa de homicidio doloso en 1998, estafa, falsificación, tenencia ilícita de armas, robo con violencia, hurto, robo y uso de vehículo de motor y apropiación indebida.

En este momento estaba siendo reclamado por ocho juzgados. También había usado tres identidades distintas cuando fue detenido, según una portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.

El cadáver de Luis Samuel Velasco fue trasladado al Instituto Anatómico Forense, en la Ciudad Universitaria de la capital, donde hoy está previsto que se le practique la autopsia. La policía recogió varios casquillos percutidos junto al cadáver y a unos 30 metros, en la esquina de la calle del Río Guadiana.

Peligrosos 'cogoteros'

"Es la típica forma de actuar de los cogoteros [ladrones que asaltan a los clientes de bancos después de que saquen grandes cantidades de dinero]. Suelen ser muy violentos y la reacción del agente ha sido de defensa propia", comentaron fuentes de la investigación. Algunos testigos afirman que había una mujer dentro del BBVA que debió de alertar a sus compinches, que esperaban fuera del banco.

Los facultativos también atendieron al agente herido, que fue trasladado al servicio de urgencias del Hospital Universitario de Getafe, donde se le apreciaron lesiones más graves de lo que parecía a primera vista. Además de un shock nervioso, había recibido un fuerte golpe en la cabeza y sufría dolores en el abdomen y cuello, por lo que fue sometido a un escáner. Ayer quedó ingresado ya que presentaba problemas de movilidad en una rodilla, además de las lesiones en el pecho, según fuentes policiales.

El policía, de 38 años, lleva 16 de servicio en el cuerpo. Fuentes del Ayuntamiento de Getafe destacaron que es uno de los agentes con mayor experiencia y que tiene "una hoja de servicio intachable". Reside en Parla y trabaja en el turno de noche.

Este homicidio eleva a 31 las muertes violentas registradas en la región en lo que va de año. En las mismas fechas de 2005, la cifra era de 25 asesinatos.