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La Bolsa española estrenó la primera jornada de la semana con moderados descensos en sus principales indicadores. Las subidas de los últimos días dieron paso a ligeras tomas de beneficios, lo que arrastró al Ibex 35 por debajo de los 11.400 puntos.

La renta variable española inició la mañana con moderadas pérdidas y, sobre todo, con tranquilidad ante la ausencia de noticias. La festividad en la bolsa de Wall Street, y también de Londres, tuvo su reflejo en la línea operativa de los mercados que optaron por operar lo justo a la espera de nuevas noticias. La escasez de datos económicos también se dejó sentir, principalmente en el volumen de negocio.

La actividad en el mercado continuo fue de 2.130 millones de euros, lejos de los más de 4.000 millones negociados en jornadas anteriores, y 600 millones fueron a parar a operaciones especiales como la registrada en el Banco de Santander.

Una jornada tranquila en todas las bolsas, y ahora la atención se centrará en los datos que se publiquen los próximos días. Muchos analistas consideran que la volatilidad estará presente en los mercados, al menos en el corto plazo. El Ibex 35 finalizó con un descenso del 0,38%, en los 11.371,40 puntos, con los grandes valores en el lado negativo. Telefónica terminó con una pérdida del 0,24% y Santander que bajó el 0,87%. En el resto de las plazas europeas también los descensos fueron protagonistas del día con un 0,58% para Francfort, y el 0,59% de la Bolsa de París.

La moneda única también se vio afectada por la jornada festiva con un cambio medio que se fijó en los 1,2758 dólares. En el mercado de deuda, la rentabilidad de los bonos a 10 años subió hasta el 3,89%, desde los 3,88% de los últimos días.