El cumpleaños infeliz de McLaren

Metido debajo de un coche en el taller de su padre en Auckland (Nueva Zelanda), nadie hubiera imaginado que Bruce McLaren acabaría fundando una escudería que se convertiría en un emblema para todo el automovilismo mundial y en especial en la Fórmula 1. En Mónaco McLaren celebra el 40º aniversario de su debut en F-1, donde llegó en 1966 con Bruce como piloto, acompañado por cuatro mecánicos. Ahora la escudería, dirigida por Ron Dennis, alardea de haber ganado 148 carreras y conquistado 11 títulos de pilotos. Pero, equipada con motores Mercedes, copropietario, se encuentra sumida en una crisis económica y de resultados.

A los dos años, nadie hubiera apostado un duro por Bruce McLaren, que padecía una disfunción orgánica que le dejó dos años sin poder caminar. Pero a los 16, a Bruce McLaren no le quedaban secuelas, conducía un Austin y estaba a punto de comenzar a estudiar ingeniería. Competía en carreras locales y en las series Tasman de F-2 que se desarrollaban entre Australia y Nueva Zelanda y que convirtieron la zona en una potencia de la competición automovilística, aportando nombres tan importantes como Chris Amon, Jack Brabham, Dennis Hulme y el propio McLaren.

Pero lo que realmente cambió su vida fue recibir una beca para competir en la F-2 europea en 1958. Su progresión fue tan brutal que al año siguiente recibió una oferta para incorporarse al equipo de Jack Brabham de F-1 que corría con Cooper. McLaren ganó su primera carrera en Estados Unidos, que se incorporaba al Mundial de F-1 y se corrió en Sebring. Pero fue el deterioro del equipo lo que le llevó a crear su propia escudería, la Bruce McLaren Motor Racing en 1964. Modificó los chasis de Cooper y compitió en la Tasman Series, con Tim Mayer de compañero de equipo. Mayer se mató en un accidente, pero él fue campeón.

Tras varias aventuras, en 1966 McLaren construyó su primer F-1, diseñado por Robin Herd, y el coche debutó en el Gran Premio de Montecarlo, donde ha ganado 13 veces. Llevaba un motor Ford, que sólo en 1967 se cambió por un BRM. En aquella época ganó las 24 Horas de Le Mans con un Ford GT 40, las 500 Millas de Indianápolis, y dominó cuatro años el campeonato CanAm. La primera victoria en F-1 llegó en 1968 cuando volvió a los Cosworth, y con el mismo Bruce McLaren al volante ganó el GP de Bélgica.

Sin embargo, en 1970 se produjo un hecho trascendental para el futuro de la escudería McLaren. Bruce se mató mientras realizaba unos entrenamientos de CanAm en el circuito de Goodwood. Y sin su líder, la escudería fue dando tumbos hasta que en septiembre de 1980, Marlboro, patrocinador de McLaren, provocó la fusión de su escudería y la Project Four, propiedad de Ron Dennis, otro luchador con una formación autodidacta. El nuevo equipo se llamó McLaren International. Y Dennis tomó el control en 1981, se rodeó de los mejores ingenieros y convirtió la escudería en el estandarte de la F-1. Fue el primer equipo que incorporó la fibra de carbono en los chasis, gracias al conocimiento aerodinámico de John Barnard, y sus bólidos arrasaron cuando Dennis se asoció a Mansour Ojjeh, fundador de Tag, y aplicó el turbo a los motores.

Con McLaren, Niki Lauda fue campeón en 1984, Alain Prost en 1985 y 1986, y Ayrton Senna en 1988, 1990 y 1991. Con Prost y Senna en el equipo, McLaren ganó 15 de las 16 carreras del Mundial en 1988. El equipo ha competido en 602 grandes premios de F-1, ganado 148 carreras, conquistado 11 títulos de pilotos, ocho de constructores, y ha subido al podio 387 veces. Además, Dennis ha creado el Centro Tecnológico de Woking, el más avanzado e innovador de la F-1. Pero su obra magna le costó unos 400 millones de euros y le ha conllevado una deuda que está afectando la marcha de la escudería a nivel deportivo: este año no han ganado aún ninguna carrera y su último título fue el de Mikka Hakinen en 1999, poco después de que se incorporara Mercedes.