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Columna
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Jóvenes 'wiki'

Manuel Rivas

Hemos pasado en pocos años, tal vez los mismos que tardó Peter Pan en descubrir las canas, de una exaltación de Juvenalia, de adulación a lo juvenil, a un estado de opinión que no sé si llamar resentimiento adulto o simplemente cascarrabias. Un estado de escarnio contra los jóvenes. En los años ochenta, la consigna era buscar al joven. Descubrir los nuevos valores. En las artes, en la economía, en la política, en el alpinismo social en general, cada año de menos era un mérito más. El resentimiento ha pasado de ser una rumia a un rasgo de elitismo taciturno, muy característico de una cierta intelectualidad ex progresista, aquella que al interpelar a otros no se sabe si acusa a su sombra pasada o al espejo tragón del que habló Gómez de la Serna. Al fin y al cabo, se trata de meter dos entelequias en el mismo saco y con la misma intención de escarnio generalista. Si la juventud es como es, dice el intelectual taciturno, se debe al fracaso progresista: en educación, en valores, en cultura. Tantas facilidades, tanta libertad, ¿para qué? Las huestes del Macrobotellón, la Superorgía, la Megafumada. Generaciones de estudiantes y universitarios analfabetos. Muchedumbres pueriles que pasaron alegremente de la plastilina al iPod. Un retrato falso, expresado como verdad apodíctica, que prescinde de toda sutileza. La Intelectualidad Taciturna y la Conferencia Episcopal llegan así a un parecido dictamen: toda la culpa es del progresismo. Este desastre, nosotros que veníamos de una educación superior donde los ministros dividían las clases en tres mitades. Ya lo anunció en su blog Marcelino Menéndez Pelayo: "Aunque no sean muchos los librepensadores españoles, bien puede afirmarse de ellos que son de la peor casta de impíos que se conocen en el mundo". En cuestión de cambios culturales, sean jóvenes, intelectuales o pensionistas, lo imprescindible es leer a Juan Cueto, con su cabeza de esfera armilar. Su denuncia de que en la Red, en España, hay un fenómeno insólito en Europa: el predominio del pensamiento ciberfacha. ¿Existe un contrapunto? Sí, los cientos de blogs de gente joven, alternativa, que se reúnen en wikimedios, nuevos ateneos de la Red. De ahí han surgido las convocatorias a Sentadas por una vivienda digna y contra la especulación inmobiliaria. Wiki es un término que procede del hawaiano y significa rápido. ¡Wiki, wiki!

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