La industria defiende su papel en el avance tecnológico
Doug Lowenstein, presidente de la Asociación de Software Electrónico norteamericana (ESA en sus siglas en inglés), en un discurso inaugural de la feria E3 muy patriótico destacó la importancia que la industria del videojuego tiene para un país y cómo ésta genera muchos más ingresos que los producidos por la venta de los títulos y las consolas en sí.
El informe Videojuegos, un serio negocio para la economía norteamericana, del profesor de derecho en la Universidad de Georgetown
J. Gregory Sidak, y el fundador de la Brookings Institution Robert W. Crandall, concluye que esta industria "se ha convertido en un negocio que crea miles de puestos de trabajo, mejora el rendimiento de otras industrias e incentiva el avance tecnológico. Esta es una industria que va más allá de la diversión y los juegos. Es un negocio importante que mejora la formación, la eficiencia y la productividad de compañías tecnológicas pertenecientes a otros segmentos. Los videojuegos tienen un papel muy importante para mantener el liderazgo de EE UU en el campo de la tecnología de la información".
El ocio electrónico emplea a 144.000 trabajadores en Estados Unidos, con una previsión de que llegue a 265.000 puestos en 2009. En España son 5.000 los profesionales que trabajan en esta floreciente industria. El sueldo bruto de un programador en sus primeros años alcanza 50.000 dólares, bastante más que lo que cobran otros licenciados. La ESA considera de gran importancia que estos puestos requieran altos conocimientos de matemáticas y otras ciencias, "en una época en que los políticos están preocupados por el bajo rendimiento escolar de los jóvenes, nuestra industria ayuda a que los estudiantes se especialicen en disciplinas críticas para el futuro de un país".
Otro estudio, realizado por la Federación Americana de Científicos, que se publicará el próximo mes de junio, destaca los beneficios para el desarrollo mental de la práctica de esta forma de ocio digital.
"La superación de los retos que proponen los videojuegos complejos demuestra que éstos ayudan a desarrollar habilidades mentales como el pensamiento estratégico, el análisis interpretativo, la solución de problemas, la formulación de planes y la adaptación a los cambios rápidos, habilidades cada vez más buscadas en los trabajadores y necesarias para competir con la mano de obra barata de otras naciones".
Estas argumentaciones y estudios salen del lobby del software de entretenimiento para tapar las bocas de muchos políticos, entre ellos Hillary Clinton, que centran sus ataques en los perjuicios que puede causar el uso de títulos de índole violenta en los menores de edad.
Doug Lowenstein, presidente de la Entertainment Software Association (ESA), se muestra convencido de que en el año 2010, cuando haya 75 millones de jugadores estadounidenses de entre 10 y 35 años, estas peleas entre la clase política dirigente y los amantes del entretenimiento electrónico desaparecerán. Básicamente porque los puestos de responsabilidad en la sociedad los ocuparán personas que habrán crecido jugando y, por lo tanto, desaparecerá la brecha producida por el desconocimiento que hoy les separa.
Sin embargo, se siguen realizando todo tipo de acciones para proteger este lucrativo negocio. La última ha sido la creación de la Videogame Voters, organización fundada por la ESA para dar a conocer a la sociedad, y a la clase política en especial, cuál es la postura de los consumidores frente a las amenazas que esta práctica representa para los distintos sectores de la comunidad, desde los menores a los inmigrantes.
El nombre de la organización deja claro que los usuarios son también votantes y que los políticos deben tenerles en cuenta cuando realizan todo tipo de afirmaciones, verídicas o falaces, que afecten a sus intereses. Todos los jugadores están invitados a afiliarse.
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