Fernando Alonso busca su primera línea de parrilla

A peor calificación los sábados, más riesgos los domingos. Si el principio universal de la fórmula 1 presiona esta temporada a un piloto, ése no es otro que Fernando Alonso. El líder del Mundial se ha visto obligado a remontar posiciones en las cuatro carreras disputadas. En Nurburgring, su objetivo es romper con la dinámica que le ha impedido situar su Renault en la primera línea de la parrilla de salida este año. El tributo que ha pagado Alonso podía haber sido mucho más gravoso, pero su pericia en las salidas y el rendimiento y la fiabilidad de su bólido en las tandas largas le han permitido salir airoso: es líder del campeonato con 15 puntos sobre Michael Schumacher y 18 sobre Kimi Raikkonen. Alonso admite que ha contado con una cuota de suerte. "Me preocupa tener que remontar siempre, porque eso supone estar metido en líos tanto en la salida como en las primeras vueltas", cuenta. "Hasta ahora todo ha ido bien, pero podía ir mal y haber acabado algunas carreras en la primera curva con algún toque o alguna tontería".

Los motivos por los que Alonso se ha visto retrasado en la parrilla a la segunda (Bahrein y Australia), a la tercera (San Marino) y hasta a la cuarta línea (Malaisia) en las parrillas de salida han sido múltiples. "Hasta ahora no he conseguido una cronometrada perfecta", admite. En Bahrein perdió alguna décima porque le estuvieron hablando por la radio durante su vuelta rápida; en Malaisia su equipo se equivocó y le duplicó la carga de gasolina; en Australia, además de un pequeño rifirrafe con su compañero de equipo, Giancarlo Fisichella, tampoco acabó satisfecho, al igual que en Imola. "No sé si es porque no estamos acostumbrados al nuevo formato de la clasificación, pero tenemos que mejorar", comenta Alonso. "Lo ideal en Nurburgring es salir entre los tres o cuatro primeros, porque más allá te metes en problemas".

Tras las dos primeras sesiones de entrenamientos en Nurburgring, Alonso se situó con el segundo mejor tiempo, sólo superado por uno de los pilotos que no cuentan, el probador de Williams Alex Wurz, y con sólo cuatro centésimas de segundo de ventaja respecto a Michael Schumacher, que ratificó las buenas sensaciones de su Ferrari después de su victoria en Imola. Al igual que los McLaren, que no se mostraron muy competitivos, Fisichella estuvo muy alejado de las prestaciones de Alonso. El nuevo sistema de calificación se disputa en tres sesiones. En las dos primeras se eliminan los seis peores coches, y en la última, de 20 minutos, los restantes se disputan las 10 primeras posiciones. Los pilotos piden que se reduzca esta última sesión, porque no tiene sentido ir quemando gasolina hasta el final para cambiar luego los neumáticos e intentar lograr la pole en los últimos cinco minutos.