Autostrade desautoriza a su consejero delegado y aprueba la fusión con Abertis

Tras una reunión de casi cuatro horas, el consejo de administración de Autostrade dio anoche finalmente luz verde a la fusión con la española Abertis. El proyecto, destinado a crear el mayor grupo de autopistas del mundo, se lleva por delante al consejero delegado de la empresa italiana, Vito Gamberale, que defendió rechazar la fusión y por ello se ha enfrentado a la familia Benetton, primer accionista de Autostrade. El consejo del grupo italiano revocó los poderes de Gamberale. A partir de ahora los asume el presidente, Gian Maria Gros-Pietro, y su director general, Giovanni Castellucci.

El consejo de Autostrade, en el que Abertis está representada a través de su consejero delegado Salvador Alemany y al que asistió el propio Gamberale, se reunió a partir de las seis de la tarde. Había expectación ya desde por la mañana, cuando la compañía controlada por los Benetton había colgado en su página web un comunicado en el que informaba, "por la debida transparencia informativa", de que la "revocación" de poderes en manos de Gamberale estaba en el orden del día del consejo, más allá del estudio del proyecto de fusión. Autostrade explicó que dos consejeros del grupo italiano habían solicitado que se abordara dicha revocación "por causa justa".

La "causa justa" alude a lo ocurrido el pasado viernes, día en que Gamberale expresó públicamente su reticencia a la integración con Abertis "por el bien del país", y en el que confió en que el consejo de ayer "volviera a meditar" sobre el proyecto. En la presentación que ambas empresas realizaron en Barcelona la semana pasada, el consejero delegado, lejos de lamentarse por la operación, la había considerado "de gran importancia para el Mediterráneo" y había realizado un vistoso paralelismo entre el negocio de las autopistas y el comercio en la antigua Roma.

La prensa italiana atribuye este cambio de parecer a supuestas ambiciones políticas de Gamberale, y también al papel marginal que se le atribuye en la negociación para crear la nueva Abertis, en la que se le reservaba una vicepresidencia a compartir con Florentino Pérez (ACS).

Abertis sostiene que una salida de Gamberale no afectaría a la fusión, que llevaba negociándose tres años. Hoy, la compañía explicará el proyecto a sus accionistas, después de que su consejo lo apruebe, salvo sorpresas. Abertis ha pedido a cuatro bancos un "dictamen independiente" sobre la ecuación de canje propuesta: una acción suya por una de Autostrade, previo reparto de un dividendo extra de 3,75 euros por cada título del grupo italiano. Según comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el análisis del canje lo realizarán JP Morgan, Credit Suisse, BNP Paribas y Dresdner Kleinwort.