El secuestro de una madre y su hija en Matadepera no fue premeditado, según fuentes de la investigación
Las cuatro personas armadas que el lunes irrumpieron en una lujosa torre de la urbanización de Cavall Bernat, en Matadepera (Vallès Occidental), y secuestraron a una joven de 25 años y a su hija de cinco, sustrajeron 3.000 euros de dos cajeros automáticos de Cerdanyola del Vallès, según la Guardia Civil. Fue lo único que consiguieron, tras un secuestro "improvisado", según fuentes cercanas a la investigación, que duró menos de cinco horas. Mientras los secuestradores sacaban el dinero con las tarjetas de crédito robadas, a cara descubierta, la mujer y la niña permanecían encerradas en el maletero del vehículo. Nunca, durante todo el secuestro, salieron de ahí, asegura la Guardia Civil, ni tampoco pudieron ver la cara de sus secuestradores. Las cámaras de los cajeros, no obstante, podrían haber servido para identificarlos.
Todo apunta, según aseguran las mismas fuentes, que el secuestro de la mujer y la niña no fue premeditado. Simplemente, a los ladrones, de origen suramericano, las cosas no les salieron como esperaban. Los delincuentes despertaron al propietario de la torre, Fernando García, un empresario de 53 años, a punta de pistola a las 6.30 horas. Según relató el lunes Cristian, uno de los cinco hijos de Fernando, "querían saber dónde estaba la caja fuerte, pero mi padre les dijo que en la casa no había dinero". Fue un robo frustrado que acabó en secuestro, pero lo que la investigación todavía no ha querido revelar, es por qué los ladrones insistieron tanto en una supuesta caja fuerte, y por qué escogieron precisamente esta torre, entre las muchas de similares características que hay en la urbanización.
Al no encontrar dinero, los ladrones tomaron como rehén a la compañera sentimental de Fernando y a su hija. También se llevaron todas las tarjetas de crédito y dos coches de la marca Mercedes. Más de cuatro horas después, un policía local encontró a la mujer y a la pequeña en el maletero de uno de los vehículos robados.
Fernando García y la joven colombiana son pareja desde hace unos tres años. El Ayuntamiento de Matadepera ha solicitado al Departamento de Interior y a Delegación del Gobierno "refuerzos para evitar este tipos de hechos". El consistorio explicó ayer en un comunicado que tiene previsto "convocar para la próxima semana una reunión con todas las asociaciones de vecinos del municipio para buscar soluciones". El Ayuntamiento ha convocado una junta de seguridad local para el próximo viernes y asegura que "sigue trabajando en el proyecto de instalación de cámaras de videovigilancia en los accesos al municipio".
