Esplendor festero bajo la lluvia

La lluvia caída ayer por la tarde no arredró la Entrada del capitán Moro en Alcoi. Ni el público, ni los músicos, ni mucho menos los festers de Alcoi se echaron atrás ante la persistente lluvia que empezó a caer media hora antes del inicio del desfile de la tarde. La meteorología aguantó por la mañana y acompañó el desfile de los cristianos, que transcurrió entre nubes y claros y temperaturas en descenso.

Por la tarde, la presencia del agua convocó a los directivos de la Associació de Sant Jordi y primers Trons, o representantes de las filaes. Se reunieron a las cinco de la tarde para debatir el inicio o la suspensión de la Entrada Mora. Finalmente, la filà Cordón, que este año acompaña al capitán Moro, optó sacrificar el lujo y la vistosidad de sus trajes a cambio del aplauso y del reconocimiento público, que también aguantó el tipo bajo la lluvia en las 17.000 sillas que se instalaron a lo largo del recorrido. El pronóstico del tiempo no se presentaba bueno y eso provocó que a mediados de semana se agotaran los chubasqueros y paraguas de mano en previsión de lluvia, que acabó por caer ayer por la tarde. Deslució, pero no paró el avance de los boatos y festers moros que han trabajado duro en el último año para sacar la fiesta a la calle.

Los más afortunados fueron aquellos que los siguieron desde alguno de los balcones de los edificios por los que transcurrieron las Entradas de Moros y Cristianos.

Palcos a precio de oro

Para disfrutar de estos palcos en Alcoi hay quien ha llegado pagar hasta 3.000 euros por contemplar los desfiles de ayer desde las alturas. "Esto es lo máximo, lo normal es que el precio oscile entre los 600 y los 1.200 euros", explicó una agente de la Inmobiliaria Carbonell de Alcoi. Esta empresa tiene oficinas en otras poblaciones como Ontinyent o Banyeres de Mariola. Sin embargo, al alquiler de pisos para contemplar las fiestas es una práctica casi exclusiva de Alcoi. "La demanda es tan amplia que incluso llegan a subarrendarse viviendas. Hay propietarios que alquilan sus pisos a estudiantes con la condición de que durante las fiestas dejen la casa disponible para las Entradas", explicó.

Las calles San Nicolas, San Lorenzo y Plaza de España, por donde ayer transcurrieron las Entradas de Moros y Cristianos, conforman el núcleo del centro histórico. Algunas de sus construcciones rondan el siglo de vida y la mayoría se encuentran deshabitadas el resto del año. Esta circunstancia obliga a las brigadas municipales del ayuntamiento de Alcoi a repasar el estado de los balcones para evitar accidentes.

Las fiestas de Moros y Cristianos siguen hoy con procesiones y misa de culto a Sant Jordi y concluirán mañana con el Alardo y una batalla de arcabucería.