AENA aumenta los permisos de vuelo un 15% en Barajas

Nueve meses después de la inauguración de la nueva terminal de Madrid-Barajas, los despegues y aterrizajes en el aeropuerto madrileño pasarán, a partir de octubre, de 78 a 90 por hora. AENA llevaba cinco años sin poner a disposición de las compañías más permisos de vuelo. El ente público que gestiona los aeródromos abrió ayer el proceso para que las compañías puedan incrementar sus operaciones.

Las aerolíneas deberán presentar sus solicitudes antes del 11 de mayo. El 1 de junio, AENA comunicará la asignación inicial, que quedará formalizada en la conferencia mundial de la Asociación Internacional del Transporte Aéreo, que se celebrará en Vancouver (Canadá) del 10 al 13 de junio.

La apertura de la nueva terminal (en la que se han invertido más de 6.200 millones de euros) había abierto grandes expectativas entre las aerolíneas, que se vieron en parte frustradas al decidir AENA posponer el incremento de la capacidad hasta octubre próximo por "prudencia". Desde marzo de 2001 la capacidad de Barajas se mantenía en 78 operaciones a la hora, lo que impedía a las compañías aprovechar permisos disponibles en otros aeropuertos menos congestionados si querían conectar con el de Madrid.

Fuentes de AENA explicaron en su día que era necesario "un periodo de transición" entre la entrada en servicio de las nuevas infraestructuras y el aumento de las operaciones, para poder encajar los procedimientos de todos los operadores y evitar mayores problemas en la puesta en marcha. Desde la inauguración, el 5 de febrero, la T-4 ha sufrido diversos problemas (sobre todo en el complejo sistema de gestión de equipajes), pero ciertamente ha aprobado la reválida de su primera Semana Santa, sin incidentes reseñables.

Las actuales cuatro pistas de Barajas admitirán un máximo de 120 aterrizajes y despegues a la hora, cuyos permisos se irán poniendo a disposición de las aerolíneas progresivamente. El aumento de las operaciones a 90 por hora a partir del 29 de octubre no quiere decir que se vayan a producir todos esos movimientos, señalan fuentes de AENA, puesto que serán las peticiones de las compañías las que determinen si se quedan algunos permisos libres.

Las compañías aéreas deberán devolver a AENA antes del 31 de agosto los derechos de vuelo que no vayan a utilizar. Entre las más interesadas en los nuevos permisos en Madrid se encuentran líneas de vuelos baratos, como Vueling.

Air Europa confirmó ayer su intención de pedir más permisos para incrementar sus operaciones, al igual que Spanair, que actualmente negocia con el gestor de los aeropuertos una nueva ubicación en Barajas, a cambio de retirar los procesos judiciales por el cambio en la adjudicación de los espacios de la nueva terminal, que dejó a esta aerolínea fuera de la T-4.