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Elche diseña un plan para rehabilitar las casas del barrio del Carrús

El Ayuntamiento ofrece información sobre las ayudas y fomenta el uso de ascensores

El Ayuntamiento de Elche ha iniciado un plan para mejorar la configuración urbanística del barrio del Carrús-Este, uno de los más poblados de la ciudad, con 35.000 habitantes y con graves problemas de habitabilidad debido a las construcciones de los años sesenta. Su urbanismo es duro, con una alta concentración de viviendas, calles estrechas, pocos aparcamientos públicos y muchos coches en la calle y dotaciones muy alejadas del núcleo.

Los edificios están, en muchos casos, deteriorados y necesitan reformas. "Fue construido a toda prisa", reconoce el concejal de Urbanismo, Emilio Martínez, "para acoger urgentemente a los miles de inmigrantes que llegaron a Elche en la década de los sesenta, procedentes de Andalucía, Extremadura o Castilla-La Mancha".

El nuevo planteamiento busca actuar de manera integral para "mejorar la calidad", apunta Martínez. La fisonomía del barrio es muy distinta a la que en la actualidad ofrecen las nuevas urbanizaciones con amplias aceras, plazas y jardines públicos y servicios. Por ello, se busca planificar a medio y largo plazo un espacio más humanizado y que dinamice económica y socialmente una zona que, de no actuar, iniciaría un camino hacia el deterioro y la marginalidad.

A través de la empresa pública Pimesa, se encargó a un equipo de arquitectos el estudio de las acciones que se deben emprender para cambiar la situación. La primera medida que se adoptó fue la suspensión de licencias para construir. El estudio determina que es necesario actuar en las viviendas existentes, por ejemplo, con la rehabilitación de fachadas o de estructuras, la incorporación de ascensores siempre que sea posible, la mejora de la accesibilidad, y actualizando la inspección técnica de los edificios que exige la ley para aquellos de más de 50 años. Otra mejora necesaria, según los técnicos, es la restauración de las aceras, el rediseño de algunos viales y, sobre todo, la creación de aparcamientos.

El estudio propone además, la posibilidad de actuar en algunas manzanas de edificios muy viejos y de planta baja, para abrir la posibilidad de permitir una construcción de más alturas a cambio de liberar espacio para zonas verdes o dotaciones. En este sentido, se han descrito ya cuatro manzanas que podrían estar en esta situación. Otra medida necesaria para mejorar el barrio es introducir servicios como la canalización del gas, la fibra óptica o la remodelación del alcantarillado.

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