Desarticulado un clan quinqui que tenía en su poder un alijo de casi 60 kilos de heroína

La Jefatura Superior de Policía de Madrid ha detenido a 11 personas (nueve españolas y dos turcas) que distribuían droga a gran escala en Madrid y Castilla-La Mancha. La redada ha permitido desarticular un clan quinqui en cuyo poder han sido decomisados casi 60 kilos de heroína de altísima pureza. Además, se ha incautado de siete coches de alta gama, cinco armas de fuego, numerosas joyas y 465.000 euros. La banda ocupaba un nivel tan elevado dentro del narcotráfico que trataba directamente con las mafias turcas e importaba la droga de la zona kurda de Turquía.

Las investigaciones comenzaron a finales del verano pasado, cuando los agentes del Grupo XIV de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Brigada Provincial de Policía Judicial detectaron la actividad de dos clanes familiares de la zona del corredor del Henares y de la zona norte de la provincia de Toledo. Éstos se dedicaban a distribuir gran cantidad de heroína procedente de Turquía, que después comercializaban a intermediarios de poblados chabolistas como Las Barranquillas (el mayor hipermercado de droga de Europa) y la Cañada Real, ambos en Villa de Vallecas.

Los investigadores se dieron cuenta de que aumentaban los contactos entre los integrantes del clan y los proveedores de la heroína. También aumentaron las medidas de seguridad por parte de ambos sectores, lo que hizo sospechar a los agentes de que en breve iba a producirse un intercambio o pase de droga.

La policía hizo las primeras detenciones el pasado sábado en Alcalá de Henares. A uno de los pisos de la organización llegaron dos vehículos. De uno de ellos, dos hombres descargaron tres maletas que metieron en la vivienda. A las cuatro horas y media, otros sospechosos salieron de la casa y volvieron a introducirlas de nuevo en otro vehículo. Los agentes lo siguieron y lo hicieron detenerse. En él intervinieron 106 paquetes con forma de ladrillo, que contenían heroína.

El vehículo iba ocupado por las hermanas Francisca y Clara Isabel Romeiro Romero, de 43 y 38 años, miembros de un clan quinqui de vieja raigambre en el llamado cruce de Villaverde. La primera, conocida como Paquita, ha sido detenida en reiteradas ocasiones por narcotráfico, según fuentes policiales. Junto a ellas iba un familiar menor de edad.

Al poco llegaron a un chalé de Alcalá de Henares otros dos integrantes del otro clan familiar: Luis Calzado, de 50 años, y su hijo Iván, de 25. El resto de detenciones se produjo entre el municipio de Camarma de Esteruelas y Torrejón de Ardoz. Entre ellos estaban los turcos Firat O., de 26 años, y Ali G., de 45.

Los investigadores registraron dos viviendas en Alcalá de Henares: una en la calle de Rosalía de Castro, número 20, y otra en la avenida de Camarma de Esteruelas, según fuentes del caso. Los policías también localizaron otros dos pisos en Torrejón de Ardoz: uno en la calle de Tenerife, número 4, y otro en la de Cibeles, 22.

Además de la heroína incautada, los agentes intervinieron 200.000 euros en metálico, un cheque-pagaré por 265.000 euros, escrituras de viviendas, una prensa hidráulica para compactar la droga, sustancia para el corte de ésta, tres pistolas (dos del calibre 9 milímetros Parabellum y otra del 9 corto) y dos rifles, así como 103 piezas de joyería, valoradas en 300.000 euros. La policía se ha incautado de dos vehículos BMW de la serie 5 propiedad de Luis Calzado y su hijo, valorados cada uno en 102.000 euros, además de un Ford Mondeo, un Suzuki, un Renault Scénic y Megane y un Opel Zafira.

"Destaca sobre todo el altísimo nivel de vida que llevaban estas dos familias. Ellos no paraban de tener juergas flamencas; y ellas, de ir a salones de belleza de lujo", comentó el inspector jefe José Luis Conde. "Ha habido que acelerar las detenciones porque, en cuanto terminaran de pasar la droga a los vendedores del siguiente escalafón, tenían comprados billetes para irse al Caribe", añadió el responsable de la Sección de Estupefacientes de la UDYCO. Pensaban ir a Punta Cana y Santo Domingo.

Conde destacó que la demanda de la heroína es aún bastante alta y que ahora es difícil su introducción en España, dado que hay guerras y muchos controles militares en zonas de producción como Afganistán y Turquía. El precio de la micra (décima parte de un gramo) es de unos ocho euros. Los casi 60 kilos de droga incautada podrían haber servido para un millón de dosis.

El delegado del Gobierno en Madrid, Constantino Méndez, felicitó a la policía por la investigación y las 11 detenciones. "Ha sido un trabajo largo y duro que ha concluido con uno de los servicios más importantes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid", concluyó Méndez.