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Aguirre revela que el PP pidió flexibilidad al regidor, aunque éste ya había decidido rectificar el sistema

Esther Sánchez

La rebelión vecinal en determinados barrios de Madrid contra los parquímetros fue un asunto debatido hace dos semanas por el comité de dirección del PP madrileño, presidido por Esperanza Aguirre. La cúpula del partido acordó que Aguirre hablara con el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y que el secretario general del partido, Francisco Granados, conversara con el vicealcalde, Manuel Cobo, para transmitir a ambos la preocupación por este asunto, según reveló ayer la jefa del Gobierno regional.

"Eso es cierto, pero también es verdad que cuando lo hicimos el alcalde ya había tomado la decisión de suprimir los aspectos más conflictivos [de los parquímetros]", explicó Aguirre en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Gobierno, que ayer se celebró en Collado Villalba. Así se lo comunicó el alcalde a la presidenta y el vicealcalde a Granados cuando éste fue a verle como emisario del partido.

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Aguirre aclaró que las cuestiones más polémicas que Ruiz-Gallardón ya había decidido abordar antes de que el partido adoptase su resolución se referían "al impedimento que existía hasta ese momento de aparcar más de hora y media, cualquiera que fuera el precio [en realidad, el límite era dos horas en el mismo barrio], y que se atendiesen algunas de las reivindicaciones populares con respecto a algunas zonas de los cascos antiguos de los distritos".

La presidenta aseguró que el alcalde mantenía, ya en ese momento, una postura dialogante con los vecinos. "De hecho, había convocado una reunión a la que los vecinos no acudieron, ellos sabrán la razón", afirmó. Aguirre está convencida de que las disfunciones que se hayan podido producir en esta segunda etapa de implantación de los parquímetros entre vecinos y Ayuntamiento van a ser solucionadas.

Pero, al mismo tiempo, la mandataria quiso subrayar que los primeros parquímetros, instalados en 2002, fueron muy bien recibidos tanto por los comerciantes como por ciudadanos. Reconoció que el actual rechazo de algunos vecinos se había producido al instalar parquímetros en zonas de la ciudad que no están exactamente en el centro histórico, ni en centros comerciales, sino en la segunda corona, más residencial y donde, según muchos vecinos, no es necesario regular el aparcamiento.

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Sobre la firma

Esther Sánchez
Forma parte del equipo de Clima y Medio Ambiente y con anterioridad del suplemento Tierra. Está especializada en biodiversidad con especial preocupación por los conflictos que afectan a la naturaleza y al desarrollo sostenible. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y ha ejercido gran parte de su carrera profesional en EL PAÍS.

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