Boda de ciervo y vino

El hostelero y experto en vinos Lucio del Campo, premio Nariz de Oro 2002, ha organizado un inédito matrimonio gastronómico con excelentes resultados, casando con un buen vino a la carne de ciervo criado en cautividad -en la primera granja especializada en España, ubicada en Marugán (Segovia), que dirige Javier Martín-, lo que hace que sea más tierna y más ligera de sabor y aumenta sus posibilidades culinarias. Los caldos del enlace los puso el histórico bodeguero Alejandro Fernández, de 73 años, y se encargó de servirlo la campeona de España de Sumilleres de 2004, Henar Puente. En los fogones del cocinero David Martínez se elaboraron diversos platos a base de distintas partes del animal, con el fin de intentar demostrar que en tierra de asados se puede hacer también una cocina diferente con otro planteamiento de servicio y estética más allá del tradicional. Y de la música, que no faltó, como en una buena boda que se precie, se encargaron Gaspar Payá, Luisa Pérez y Guillermo Parra. Hasta hubo quien grito aquello de "¡viva los novios!".