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Simancas pide a Aguirre que fuerce al alcalde a rectificar

Jesús Sérvulo González

El portavoz socialista en la Asamblea de Madrid, Rafael Simancas, exigió ayer a la presidenta regional, Esperanza Aguirre, que "asuma las competencias que le otorgan los artículos 26, 27 y 28 del Estatuto de Autonomía y obligue al alcalde de Madrid a rectificar en la implantación indiscriminada de parquímetros".

Simancas hizo esta reclamación tras reunirse con representantes de las asociaciones vecinales de los barrios de Fuencarral, El Pilar, Carabanchel y Hortaleza. El líder socialista instó a la presidenta Aguirre a seguir el criterio adoptado por el Ayuntamiento de Móstoles (PP), que retiró "el proyecto de los parquímetros ante las protestas de los ciudadanos".

Simancas precisó ante los representantes vecinales que está a favor de los parquímetros, pero como instrumento regulador de la movilidad. "Tienen que ser aplicados de una forma razonable", apuntó.

Los representantes de los vecinos afectados por la ampliación del servicio del estacionamiento regulado (SER) a 17 barrios de Madrid y cuatro cascos históricos aseguraron ayer: "Hasta que el alcalde de Madrid [Alberto Ruiz-Gallardón] no retire los parquímetros, seguiremos con las protestas".

La portavoz socialista municipal, Trinidad Jiménez, reclamó a Ruiz-Gallardón que retire los parquímetros porque "son un mero instrumento recaudatorio". Jiménez instó al alcalde a "reconocer su error y abandonar la soberbia con la que gobierna". La edil socialista mostró su apoyo a los vecinos y demandó planes de movilidad consensuados con los vecinos, inversiones en aparcamientos para residentes y otros disuasorios en el entorno de la M-40.

Reivindicación vecinal

Carlos Sánchez, de la asociación La Unión del barrio de Hortaleza, insistió en que las protestas de las últimas semanas no responden a un fin político. "Las reivindicaciones surgen por un problema vecinal, no político", destacó Sánchez. "Sólo tenemos un enemigo común, que son los parquímetros", agregó.

Emiliano López, representante de los vecinos del casco antiguo de Carabanchel Bajo, manifestó que en su barrio existen 500 plazas de la Empresa Municipal de Vivienda (EMV) y del Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima) que están sin adjudicar. "Con ellas solucionaríamos los problemas de aparcamiento del barrio", remachó.

Elena Ortiz, de la Asociación Vecinal del Casco Histórico de Hortaleza, denunció la manipulación de la reunión que mantuvieron con el concejal de Seguridad, Pedro Calvo. "No se han creado mesas de negociación, como aseguraron desde el Ayuntamiento", añadió. Y se mostró rotunda: "No queremos los parquímetros".

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Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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