Los movimientos por la paz abogan por el diálogo entre religiones
Las primeras jornadas de El movimiento por la paz en Cataluña concluyeron ayer con la proclamación de que el entendimiento entre religiones es la única manera para acabar con los conflictos originados recientemente por la publicación de las viñetas donde aparecía Mahoma. Estas jornadas se celebraron durante el pasado fin de semana en Barcelona y contaron con la participación de 230 personas miembros de diversas entidades y plataformas por la paz de toda Cataluña, como Justícia i Pau, la fundación por la paz Intermón-Oxfam y Plataforma contra la Guerra, entre otras, informa Efe.
Los participantes se distribuyeron en ocho mesas de trabajo en las que hicieron balance de la trayectoria de los movimientos por la paz de Cataluña desde los años cincuenta, además de analizar el futuro del movimiento pacifista.
El acto de clausura corrió a cargo del filósofo Javier Sádaba, quien abogó por el diálogo entre religiones para solucionar la crisis generada por las viñetas y proclamó que sólo la cultura y la ética sirven para enfrentarse a la violencia. Otra conclusión extraída de estas jornadas ha sido "la necesidad de proceder al desarme", en palabras de Arcadi Oliveras, presidente del Consejo Catalán de Fomento de la Paz, que pidió la creación de un órgano consultivo y participativo donde haya cabida para los movimientos por la paz.
También ha habido mensajes para los políticos, como el lanzado por el secretario general de Relaciones Institucionales, Francesc Baltasar, para que el Gobierno central otorgue la gestión del castillo de Montjuïc a Cataluña "sin condiciones, para que se convierta en un equipamiento de paz".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.