Las aerolíneas acusan a Heathrow de discriminación en el reparto de fuel

Numerosas compañías extranjeras, lideradas por American Airlines, han acusado al aeropuerto londinense de Heathrow de discriminación en el reparto del fuel, por lo que tienen que afrontar unos costos adicionales superiores a los de aerolíneas británicas. Heathrow tuvo que racionar la venta de fuel tras el incendio, en diciembre, de los depósitos de carburante de Buncefield, de donde procedía un 35% del suministro. Pero mientras las británicas reciben un 55% del carburante habitual para vuelos cortos y un 82% en los de largo recorrido, las extranjeras sólo pueden adquirir un 40% y un 70%.

La dirección de Heathrow arguye que las primeras operan muchísimos más vuelos y que si tuvieran que empezar a cancelar viajes por falta de carburante podría ser el caos. Ese racionamiento inferior significa que han de volar hacia Heathrow con más carburante del habitual, lo que encarece el vuelo porque el avión gasta más fuel al soportar más peso, o han de hacer escala en otros destinos para repostar.

Thai Airways ha estado repostando en Copenhague, Singapore Airlines en Frankfurt, Quantas en Stansted, al noreste de Londres, y South African Airways en Milán. American Airlines estima que el racionamiento le cuesta 20.000 dólares al día (casi 17.000 euros) y se plantea aplicar un suplemento de 4,5 euros por billete en ese aeropuerto.

La Air Transport Association, que agrupa a las compañías comerciales de Estados Unidos, calcula que las aerolíneas no británicas están gastando un millón de dólares adicionales al día. Lo que les molesta no es tanto ese gasto adicional, provocado por circunstancias excepcionales, sino la discriminación a favor de las compañías británicas.

El Departamento de Estado de Estados Unidos ha enviado una queja al Gobierno británico. Varias compañías han protestado a su vez ante la Asociación Internacional de Transporte Aéreo, que se reunirá el jueves con las partes para buscar una solución.