Dos vecinos de Cádiz vuelven a denunciar coacciones de promotores para que abandonen sus viviendas

Dos vecinos de la ciudad de Cádiz denunciaron ayer ser víctimas de coacciones de unos promotores inmobiliarios que pretenden desalojarles de las viviendas en las que residen. Ante estas prácticas, atribuidas a los llamados asustaviejas, los vecinos presentaron una queja en la Delegación de Urbanismo del Ayuntamiento de Cádiz, sin que, según afirman, hayan recibido respuesta, ayuda o asesoramiento municipal.

El PSOE aprovechó ayer estas denuncias para sostener que las medidas anunciadas por el gobierno local, del PP, contra los asustaviejas son "insuficientes".

El Ayuntamiento de Cádiz, que preside la alcaldesa Teófila Martínez, anunció semanas atrás que un grupo de abogados gaditanos asesorará en adelante a los inquilinos que denuncien sufrir acoso. Sin embargo, según el PSOE, las dos nuevas denuncias pusieron ayer en entredicho este servicio de arbitraje que podían solicitar los ciudadanos en la Oficina de Servicio Integral de Atención Municipal al Inquilino.

Uno de estos casos es el de Manuel Miraut, único vecino que queda en una de las fincas de la casa de las Cuatro Torres, situada en la céntrica plaza Arguelles. Este ciudadano denunció sufrir cortes en el suministro eléctrico, falta de limpieza y filtraciones de agua. La administradora del inmueble rechaza cualquier responsabilidad y se ha negado a acometer reformas. Miraut denunció esta situación ante la Asociación de Consumidores y Usuarios y envió una carta en octubre de 2005 para advertir de su situación sin que haya recibido aún respuesta. "Esta dejadez afecta a muchos más vecinos", aseguró el secretario local del PSOE de Cádiz, Federico Pérez Peralta.

Es el caso de los inquilinos de San Miguel 9, que se han dirigido ya tres veces a la Delegación de Urbanismo del Ayuntamiento para conocer el estado de las obras de seguridad de su vivienda y aún no saben cuándo podrán volver a sus viviendas.